La legislatura de Idaho aprobó el jueves por la noche una ley que hace ilegal que las menores viajen fuera del estado para hacerse un aborto sin el consentimiento de los padres. Esta sería la primera de su tipo en el país.
La legislación, que va camino al despacho del gobernador para ser firmada, permitirá acusar penalmente a quienes ayuden a menores embarazadas a cruzar las fronteras interestatales para abortar, informó NPR.
Idaho tiene una prohibición casi total del aborto. Por su parte, Washington y Oregón, que son estados con los que colinda la entidad, permiten que las menores aborten sin el consentimiento de sus padres.
Según el proyecto de ley HB 242, hay pena de hasta cinco años para cualquier adulto que acompañe a una menor fuera del estado para realizarse este procedimiento sin el consentimiento de los padres, una acción que el proyecto de ley llama “tráfico de abortos”.
El proyecto de ley entraría en vigor 30 días después de que se convierta en ley.
Las reacciones del lado demócrata y republicano
La líder de la minoría del Senado, Melissa Wintrow, una demócrata, criticó que el término “tráfico de abortos” minimiza la experiencia de las víctimas del tráfico de personas forzadas a la esclavitud o la prostitución.
- La representante también señaló que la legislación no tiene en cuenta a las menores que fueron violadas y quedaron embarazadas por sus padres y que no pueden decírselo a las autoridades de manera segura.
- Uno de los senadores republicanos estatales que apoyó el proyecto de ley, Scott Herndon, quería que la legislación tuviese incluso más alcance, mencionando que ni padres ni tutores deberían tener permitido hacer el viaje.
- “Ni a los padres ni a los tutores se les debe permitir la protección contra el tráfico de menores con fines de aborto fuera del estado”, dijo Herndon el jueves.
Según la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (UCLA), la mayoría de las adolescentes que abortan involucran a sus padres en su decisión, y aquellas que optan por no decírselo a sus padres generalmente involucran a otro “adulto de confianza”, reseñó Axios.
Cuando la Corte Suprema anuló Roe v. Wade, la decisión legal que otorgaba el derecho al aborto, el juez Brett Kavanaugh escribió en su opinión que un estado no podía prohibir que un residente viajara a otra entidad para obtener un aborto “basado en su derecho constitucional a viajar interestatalmente”.
Sin embargo, expertos legales dicen que en un panorama post-Roe, la corte superior podría revisar ese tema.
Otros estados han intentado promulgar leyes similares a las de Idaho, pero los tribunales las anularon.
