Un exabogado de Donald Trump se negó a una petición que le hizo el expresidente de presentar una declaración jurada para Archivos Nacionales en la que afirmaba que todos los registros presidenciales que estaban en Mar-a-Lago habían sido devueltos.
Trump le pidió a uno de sus abogado que mintiera sobre Mar-a-Lago
El abogado, Alex Cannon, se negó, según múltiples informes, porque no estaba seguro de que tal declaración fuera cierta. Cannon facilitaba la devolución de los registros a los Archivos que se habían extendido en ese punto durante casi un año.
El propio Trump acabó empaquetando las 15 cajas que se entregaron en enero, según The Washington Post, que fue el primero en publicar la historia, antes de pedir a Cannon que presentara la declaración a los Archivos.
- El abogado, un antiguo empleado de la Organización Trump, dijo a sus compañeros que se sentía incómodo por hacer esa declaración y sus colegas le animaron a no hacerlo.
- Fuentes contactadas por el Post dijeron que Cannon también dudaba en revisar el contenido de las cajas, ya que no tenía una autorización de seguridad y no estaba seguro de si podrían contener registros clasificados.
- El equipo legal del expresidente no envió una declaración jurada a Archivos Nacionales emitió una declaración pública en febrero, cuando se conoció la noticia de las cajas devueltas, insistiendo en que los registros fueron devueltos de manera “amistosa”.
- Según los informes, Cannon fue marginado del trato con los Archivos después de no firmar la declaración, y desde entonces ha dejado el equipo de Trump para trabajar en un bufete de abogados con sede en Washington.
¿Cuál es la verdad sobre los documentos ?
Aunque el equipo de Trump presentó, más tarde, una declaración jurada ante el Departamento de Justicia en la que afirmaba haber devuelto todos los registros presidenciales. Sin embargo, el volumen de registros clasificados dentro de las 15 cajas – 184 en total – encendería una remisión al Departamento de Justicia (DOJ).
- En esa segunda producción, el equipo de Trump entregó 38 registros clasificados, también se entregó una declaración jurada que fue redactada por un abogado pero firmada por otro.
- Después de recibir la declaración, el Departamento de Justicia procedió a obtener una orden de registro en Mar-a-Lago, recuperando otros 100 registros clasificados y unas 200 mil páginas de registros presidenciales.
- Esos documentos están ahora en el centro de una disputa legal entre el Departamento de Justicia y Trump, quien ha alegado que el privilegio ejecutivo le permite retener los registros y obtuvo una victoria de un juez de Florida que respaldó su solicitud de que un maestro especial revise las pruebas.
- El Departamento de Justicia argumenta que los registros presidenciales -clasificados o no- no son propiedad personal de Trump y no tiene derecho a retenerlos.
Fuente principal de la noticia: The Hill