Más de 1 millón de migrantes sin documentos han ingresado a Estados Unidos tras pasar la frontera durante la presidencia de Joe Biden, según documentos jurídicos internos del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés). Actualmente esperan que se haga realidad la remota posibilidad del asilo.
Estas personas provienen de más de 150 países de todo el mundo e ingresaron a EEUU de esta forma -según el DHS-, ya que hay pocas maneras de hacerlo legalmente, reseña The New York Times.
En comparación con otros grupos de personas que han ingresado a EEUU sin ser percibidos por las autoridades fronterizas durante la administración de Biden, gran parte de quienes conforman el millón tienen el deseo de lograr el asilo en el país.
Trascendió que deberán aguardar unos siete años antes de que el sistema migratorio emita una decisión sobre sus casos. Si el asilo es denegado podrán apelar, pero esto sumará años a la espera.
La situación de Maine. El caso de este estado es particular debido a que permite que quienes buscan asilo cuenten con apoyo financiero para la renta, así como para cubrir otros gastos como parte de su programa de Asistencia General. Pero en mayo las autoridades de Portland, su ciudad más poblada, informaron que ya no les garantizaría albergue a los recién llegados debido a que las viviendas de emergencia están al límite.
- “La comunidad está creciendo tanto que se está corriendo la voz de que ofrecemos ayuda (…) Por eso está llegando más gente”, dijo el director de un albergue familiar en Portland, Mike Guthrie.
- La situación migratoria, más allá de los debates políticos, ha dejado de lado la atención a lo que pasa con quienes son liberados en EEUU para esperar las audiencias y terminan esparcidos por todo el territorio.
- La presencia de los solicitantes de asilo se convierte en un desafío humanitario y un detonante político en EEUU, donde desde hace décadas no ha podido tomar una posición uniforme en cuanto a quiénes deberían ser admitidos y por cuáles motivos.
Los tiempos. El gobierno federal puede tardar hasta casi un año en dar un permiso de trabajo a los solicitantes de asilo; y en ese tiempo no hay algún tipo de financiamiento con miras a ayudarlos a satisfacer sus necesidades básicas, como sí lo hay en el caso de los refugiados.
- El debate sigue, sin embargo, no hay muchos avances hacia nuevas leyes. Ante esta situación, los migrantes se hacen parte de las comunidades estadounidenses: envían a sus hijos a las escuelas públicas y también pagan impuestos y contribuyen con la economía.
Las cifras. El Título 42, política aplicada por el expresidente Donald Trump durante su mandato, da permiso a las autoridades de devolver a los migrantes como medida de salud pública en medio de la pandemia. Se han hecho 1,7 millones de devoluciones de migrantes, incluyendo a personas que intentan cruzar repetidamente.
- Casi 300 mil migrantes han podido ingresar temporalmente a EEUU pese al Título 42 por diversas razones, entre ellas porque México o sus países de origen no los reciben de vuelta. En territorio estadounidense deben usar un dispositivo de rastreo para que el ICE monitoree su ubicación, mientras esperan sus audiencias.
- Un vocero del DHS identificado como Luis Miranda dijo en un comunicado que “aunque el sistema migratorio está en pésimas condiciones, el DHS lo está manejando de manera responsable, segura y humana y está garantizando que haya vías legales disponibles para quienes en verdad las necesitan”.
Fuente principal de la noticia: The New York Times.