Sobre el propietario de Ticketmaster pesa una investigación abierta por el Departamento de Justicia luego del caos con las entradas para la gira de Taylor Swift ocurrido esta semana, aseguran dos fuentes cercanas al asunto.
La investigación está enfocada en si Live Nation Entertaiment ha abusado de su poder sobre la multimillonaria industria de la música en vivo.
La empresa ha estado en el ojo del huracán luego de que sus sistemas colapsaron cuando los fans de Taylor Swift buscaban formas de adquirir los boletos en preventa para su gira, sin embargo, las personas aseguran que esta investigación se dio antes a la venta fallida.
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¿Qué pasa? Los miembros del personal de la división antimonopolio del Departamento de Justicia se pusieron en contacto con locales de música y también con jugadores en el mercado de tickets para preguntarles sobre las prácticas de Live Nation y la dinámica más amplia de la industria, afirmaron las fuentes que pidieron anonimato porque la investigación es delicada. Se está analizando si la empresa mantiene un monopolio sobre la industria.
- La administración de Joe Biden se ha dedicado en los últimos dos años a ampliar los límites de la ley antimonopolio. El Departamento de Justicia ha presentado varios desafíos a las principales fusiones, persuadiendo con éxito a un juez para que bloquee la compra de Simon & Schuster por parte de Penguin Random House, aunque perdieron algunos otros casos.
- Aunque 2019 fue el último año de negocios para Live Nation, no fue afectado por la pandemia del COVID-19, pues hizo 40 mil eventos en todo el mundo y vendió 485 mil millones de entradas por medio de Ticketmaster, según el informe anual de la compañía.
- Live Action es uno de los más grandes poderes de la industria de la música en la gestión de artistas. Esto significa que son los representantes personales que negocian acuerdos comerciales en nombre
La fusión. Aunque había una oposición significativa por parte de la industria musical en cuanto a la fusión, el Departamento de Justicia la aprobó, no obstante, requirió que la compañía vendiera algunas partes de su negocio.
- También se llegó a un acuerdo legal con la empresa en el que se prohibía a Live Nation amenazar a las salas de conciertos con perder el acceso a sus giras si esas salas decidían usar proveedores de ventas de entradas que no fueran Ticketmaster.
Fuente principal de la noticia: The New York Times