El cambio climático está desempeñando un papel importante en el aumento de los desastres naturales en Estados Unidos. Una evidencia de su impacto son huracanes más fuertes, inundaciones más frecuentes y los incendios forestales más intensos.
El país registró 18 desastres meteorológicos y climáticos separados en 2022 que costaron al menos mil millones de dólares, según datos de los Centros Nacionales de Información Ambiental (NCEI, en inglés) de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA en inglés).
Una situación que preocupa a los propietarios de viviendas y en especial aquellos que viven en zonas de alto riesgo.
Las inundaciones, los tornados y las tormentas de invierno encabezan la lista de los desastres naturales que más les preocupa, de acuerdo con una encuesta de Realtor.com que consultó a 1,800 dueños de inmuebles con el objetivo de entender cómo estaban preparados para los desastres naturales.
Los habitantes urbanos estaban preocupados por las inundaciones, mientras que los propietarios de viviendas rurales y suburbanas por los tornados y tormentas de invierno.
Más de las tres cuartas partes de los compradores recientes tomaron en cuenta los desastres naturales al elegir la ubicación de su hogar.
Jesús Quintero Yamin, fundador y director ejecutivo de JQ Group of Companies , una empresa de bienes raíces y desarrolladora inmobiliaria, dijo a Huella Zero que los desastres naturales están impactando el mercado a nivel nacional y uno de los aspectos más afectados son los seguros para las viviendas.
“Se está observando que en estados con un sin número de eventos climatológicos con gran escala en desastres las compañías de seguro prácticamente están negadas a mantenerse a prestar el servicio y las que quedan el aumento (de las pólizas) es de 200% a 300% y esto afecta a todas las clases sociales, es grave”, detalló.
Consideró que si en un período de tres a cuatro meses se realiza un estudio sobre el mercado asegurador, posiblemente se determine que muchas de las personas han dejado el servicio por falta de capacidad para pagarlo.
Una circunstancia que preocupa aún más cuando se aproxima la temporada de huracanes en el Atlántico. También por la época de los incendios forestales en el oeste de EE. UU. y con tornados que “ahora se están viendo en mayor número”.
“Todos esto aleja al mercado asegurador en las zonas de alto riesgo de impactos con el tema climatológico”, dijo el ejecutivo que también creó la JQ Foundation ambientalista.
Las inundaciones también preocupan en las zonas costeras aun cuando hay regulaciones que exigen tener una elevación de las construcciones superior a épocas pasadas.
“En 2021 terminamos un proyecto en la costa de Hollywood (Florida) y la regulación exigía un número determinado de pies y nosotros ese número básicamente lo duplicamos porque creemos fielmente en que el tema climatológico va ser un problema grande y no está muy lejos para que comencemos a verlo mucho más acentuado”, relató Quintero.
Otro de los estados con un alto riesgo de inundaciones en Estados Unidos es Washington donde aproximadamente el 11.3% de todas las propiedades están en riesgo sustancial de inundaciones y debido al cambio climático se espera que ese porcentaje aumente al 12% para 2050, según proyecciones de Primal Survivor, un sitio en internet que comparte consejos para ayudar a laspersonas a superar situaciones de desastre.
Edda Pujadas, agente inmobiliario de la empresa Canvas Real Estate, dijo que las inundaciones
preocupan mucho a sus clientes, sobre todo en la Florida, donde el 80% pregunta sobre ese tipo de desastre natural, porque debido al grado de peligro donde esté ubicada la propiedad, la póliza de seguro es más costosa.
Un factor que incide en la decisión del comprador porque si el pago del seguro es un monto muy elevado y el cliente tienen un crédito ya aprobado por una cantidad muy justa, eso puede hacer que el monto se escape de lo que serían los pagos mensuales.
“Entonces no es solamente la preocupación ambiental por el riesgo a la propiedad, sino porque va a incidir en sus pagos mensuales. En una zona de inundación con bastante riesgo va a pagar más seguro”, explicó a Huella Zero y agregó.
Otra de las preocupaciones, destacó, está relacionada en la protección que tenga la propiedad contra huracanes como ventanas y puertas contra los impactos de poderosos vientos porque eso genera un mayor descuento por parte de las empresas aseguradoras.
Tanto por ley para los préstamos como para los seguros, las propiedades deben tener contraventanas o protecciones tipo acordeón en las ventanas o ventanales anti-impacto.
Pujadas también consideró que “con los años nosotros hemos tomado un poco de conciencia
ambiental y una casa con protecciones contra desastres naturales tiene mucho más valor”.
Bankrate, por su parte, advirtió que los desastres naturales pueden causar grandes daños a los
hogares y citó cifras del Instituto de Información de Seguros que ubican en más de $98,000 millones las pérdidas de propiedades aseguradas en 2022.
Entre los desastres naturales que causaron pérdidas el año pasado están los huracanes con $53.200 millones, las tormentas eléctricas fuertes con $29,300 millones, los incendios forestales con $8,900 millones y las inundaciones con $3,300 millones.
