El gobernador demócrata de Colorado, Jared Polis, firmó el viernes cuatro proyectos de ley de control de armas, siguiendo el ejemplo de otros estados que están batallando en medio de un aumento nacional de delitos violentos y tiroteos masivos.
Casi de forma inmediata, los grupos defensores de las armas presentaron una demanda para revertir dos de las medidas: el aumento de la edad de 18 a 21 años para poder comprar cualquier arma y establecer un período de tres días entre la compra y la recepción, reseñó NPR.
Una tercera medida va a fortalecer leyes “bandera roja” en el estado y la cuarta legislación anulará algunas protecciones legales que tiene la industria de armas de fuego, lo que permitirá que las víctimas de violencia armada puedan interponer demandas.
Las nuevas leyes buscan disminuir el aumento de los suicidios y la violencia juvenil, así como prevenir tiroteos masivos y abrir vías para que las víctimas puedan demandar a esta industria, que ha sido ampliamente protegida.
Las legislaciones llegan cinco meses después de un tiroteo masivo en un club LGBTQ en Colorado Springs.
La opinión de los republicanos
Legisladores y ciudadanos a favor de la medida tenían lágrimas en los ojos y estallaron en aplausos cuando Polis firmaba cada proyecto de ley.
- Colorado tiene un historial de notorios tiroteos masivos, que se remonta a la masacre de Columbine High School en 1999.
- Los republicanos dijeron que los proyectos de ley eran violaciones onerosas de los derechos de la Segunda Enmienda.
- Argumentaron que las nuevas medidas van a impedir que los residentes de Colorado se defiendan en medio de un aumento de las tasas de delincuencia en el estado.
“Es un día triste para Colorado; nos estamos convirtiendo en uno de los estados más anti-Segunda Enmienda de la nación”, dijo el representante Mike Lynch, líder de la minoría republicana.
En la ceremonia de firma, el presidente del Senado, Steve Fenberg, demócrata y uno de los patrocinadores del proyecto de ley, dijo que los republicanos y otros opositores al control de armas suelen responder a los tiroteos masivos diciendo que es demasiado pronto para hablar de restringir las armas de fuego.
“No es demasiado pronto. Es demasiado tarde para muchas de las almas perdidas”, dijo Fenberg. “Necesitábamos haber hecho más para evitar lo que sucedió”.