Con el arranque de cada año, es toda una tradición apuntar a nuevas metas; sin embargo, en el entorno de los Wizards de Washington el norte es el mismo. Entre una serie de retos internos y generales, el cuadro de la capital busca lo mejor para su núcleo y sus fans.
Avanzar a los playoffs y seguir siendo la casa de varias de sus actuales piezas luce como la lista a cumplir en los primeros días del año 2023, uno especial, pues intentarán cumplir con los retos sin desajustarse en el camino.
Pero no todo pasa por ellos. Aunque en las primeras jornadas del presente calendario los Wizards se ubicaban en puestos de play-in, cualquier tropiezo o racha negativa sería más que suficiente para que los hechiceros vuelvan a ver la postemporada desde casa.
El punto en común
Todos quieren jugar los playoffs y hasta la fecha cada equipo tiene opciones matemáticas de avanzar; no obstante, el récord de los primeros en cada conferencia les brinda una mayor probabilidad de avanzar a la siguiente fase en la temporada 2022-2023 de la NBA.
En el caso de los Wizards su situación no es la más positiva, pero tampoco la peor.
Antes del arranque de la jornada del 3 de enero, los capitalinos están entre los cuatro conjuntos que disputarían el mini torneo para otorgar los dos últimos boletos a los playoffs por la Conferencia del Este.
Dichas ubicaciones hacen del séptimo y octavo sembrado medirse al primero y segundo de la tabla, en teoría, los más complicados.
Desde Washington se aspira a más, específicamente instalarse en el quinto o sexto puesto para enfrentar a combinados de menor poder. Para ello, los hechiceros deberán buscar una racha positiva para ascender y dejar gradualmente ese décimo lugar en el que amanecieron el tercer día del año.
En cuanto a estadísticas, la ofensiva de los Wizards es la décima del Este y su defensa es la octava, par de aspectos a mejorar los más rápido posible en la franquicia.
Todo el peso anotador está en sus tres figuras: Bradley Beal (23.5 tantos por juego), Kristaps Porzingis (22.2) y Kyle Kuzma (21.4); sin embargo, esto podría marcar también -para mal- el futuro cercano de la organización.
Posibles bajas en los Wizards
La lucha interna de los de Washington tiene que ver con potenciales salidas. Los tres jugadores mencionados anteriormente son precisamente los protagonistas de los rumores, en algunos casos con más peso que otros.
Beal, rostro de la franquicia, no deja de hacer ruido pese a su contrato, pues es dueño de su propio destino y eso, aunque suene como una situación contraproducente, también es capaz de fortalecer la relación entre el jugador y la gerencia.
Con una extensión de contrato por cinco años y $251 millones, el acuerdo tiene un punto particular: Beal puede vetar cualquier traspaso en el que no esté a favor, tema que lo blinda y le genera la flexibilidad para ser él quien tenga la última palabra al momento de abrir la puerta de salida.
El panorama de Kuzma es diferente.
Desde ya se conoce que el destacado jugador no ejercerá la opción de su contrato que lo llevaría a asegurar un año más con el uniforme de los Wizards y en su lugar dejará los $13 millones posibles para probarse en la agencia libre.
Pero vale aclarar que el hecho de que termine apareciendo en el mercado nada tiene que ver con un adiós seguro a la franquicia, pues en plan podría ser mantenerse como pieza en Washington a cambio de un nuevo contrato por más dinero.
Aquí no solo podría privar el dinero, también el formar parte de un grupo con más opciones de instalarse en los playoffs.
El grupo lo cierra Porzingis.
El interno que brilló mientras formaba parte de las filas de los Knicks de Nueva York y después vio su carrera perder peso cuando fue traspasado de manera sorpresiva a los Mavericks de Dallas, podría tomar un camino similar al de Kuzma.
Probarse en la agencia libre es una práctica común que se mira desde dos ángulos: en el caso de aquellos que no pretenden vestir otro uniforme y en su lugar pujar por más dinero, y el caso de quienes tienen mayores aspiraciones deportivas.
El dinero no es problema en el caso de los Wizards, pues pueden considerarse una franquicia de mercado positivo, con acuerdos inteligentes para fortalecer a sus estrellas; no obstante, poco o nada podrá concretarse si los resultados no están ahí.
En esto último debe apoyarse la organización de la capital de Estados Unidos. El primer paso es llegar a la postemporada de la campaña 2022-2023 y así ganar la confianza de sus principales basquetbolistas. Después, tomar decisiones inteligentes para que su núcleo de figuras vaya más allá de Beal, Kuzma y Porzingis.