Varios políticos de dentro y fuera de East Palestine, Ohio, quieren probar que el agua de la localidad, que aún se recupera del descarrilamiento de un tren con sustancias tóxicas, es segura para consumir, y la bebieron ellos mismos, informó Vice.
El pueblo localizado en la frontera con el estado de Pensilvania sigue en los titulares después de que, hace dos semanas, un tren de carga se descarrilara, derramando cinco vagones de cloruro de vinilo tóxico.
Mientras que los residentes reportan síntomas como dolores de cabeza y sarpullidos, así como peces y animales muertos y hasta extrañas manchas oleosas en algunos cuerpos de agua, los políticos han comenzado a acudir en masa a la ciudad para la prueba.
La tragedia ha llevado a una crítica bipartidista a la administración de Joe Biden, quien aún no ha ido al sitio, pero la reacción de algunos republicanos, como la visita de Donald Trump esta semana, llevó a algunos analistas a pensar que podría tratarse de una movida política del ala más populista del Partido Republicano.
Catando el agua de la llave
A principios de la semana, el gobernador republicano de Ohio, Mike DeWine, el representante del estado Bill Johnson, y el jefe de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de EE. UU., Michael Regan, bebieron el agua en la localidad en un intento de demostrar que es segura.
- “Es un agua bastante buena”, dijo Regan, tras dar un trago al vaso que le sirvieron, con agua de la llave.
- Días después, funcionarios locales hicieron la prueba. El representante Johnson y el vicegobernador republicano Jon Husted bebieron agua del grifo junto con funcionarios de la ciudad y la jefa de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de Ohio, Anne Vogel.
- El vicegobernador publicó el video en su Twitter y dijo: “El agua es segura y [los funcionarios de East Palestine] están trabajando las 24 horas para mantenerla así”.
Desde el Twitter de la EPA de Ohio, escribieron: “Disfrutando de un vaso de agua limpia en East Palestine”, junto con el video.
Días antes de que los funcionarios hicieran su testeo, el representante republicano de Texas, Troy Nelhs, también posteó un video probando el agua de East Palestine.
Nelhs escribió: “El alcalde de Palestina Oriental me dijo que corriera la voz de que el agua pública es segura. La bebí.Si tiene un pozo privado, los funcionarios aún recomiendan beber agua embotellada hasta que se pueda analizar”.
En el video, indica que el agua de la municipalidad es segura para beber, “No hay problemas con el agua pública en la ciudad”.
Crítica al manejo del incidente
La respuesta estatal y federal al descarrilamiento y sus consecuencias ha sido objeto de crecientes críticas bipartidistas.
- El expresidente y candidato Donald Trump realizó una visita a la localidad, en línea con las críticas que se le han hecho a la administración de Biden, quien aún no ha ido al sitio del accidente.
- Trump comentó a la multitud de simpatizantes que “nadie” había ido a East Palestine hasta que él anunció que vendría, indicó la estación local WKBN 27, afiliada de CBS News.
- Inicialmente, no se llamó a la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) para pedir apoyo, pero durante el fin de semana sí llegaron miembros de la institución.
El jefe de la Agencia de Protección Ambiental de EE. UU, Michael Regan, dijo la semana pasada que el aire y el agua en East Palestine eran seguros.
Sin embargo, el senador demócrata de Ohio, Sherrod Brown y el senador republicano J.D. Vance hicieron llegar una carta a Regan y a la titular de la Agencia de Protección Ambiental, Anne Vogel, preguntando si sus respectivas agencias o Norfolk Southern, la empresa ferroviaria, estaban monitoreando el aire en busca de dioxinas, un compuesto cancerígeno que se libera cuando se quema el cloruro de polivinilo.
El martes, la EPA a nivel federal ordenó a Norfolk Southern que “realice todas las acciones necesarias asociadas con la limpieza”.
¿Una movida política?
La reacción de los republicanos a lo ocurrido en East Palestine podría ir más allá de la crítica a la administración de Biden.
Según Vox, el incidente sirvió como otro punto de referencia para mirar la continua movida del Partido Republicano de convertirse en un partido centrado en votantes no educados a nivel universitario.
El medio añade que la tragedia podría presentar una oportunidad para que el ala populista del Partido Republicano rompa aún más con su ortodoxia y ahora apunte en contra de las corporaciones estadounidenses.
- “Creo que esta tragedia que ocurrió en East Palestine es una oportunidad para que los republicanos que han estado buscando oportunidades para distinguirse del conjunto neoliberal en el partido lo hagan”, dijo Saurabh Sharma, presidente de American Moment, una organización de políticas públicas que tiene como objetivo influir en la próxima generación de conservadores profesionales para que se vuelvan más populistas.
- Sin embargo, otros sólo vieron la visita de Trump a la localidad tras la tragedia como una oportunidad para hacer Relaciones Públicas.
“Estamos en una situación en la que el expresidente es una de las tres personas en la carrera presidencial y tiene problemas para llamar la atención”, dijo Liam Donovan, quien hace cabildeo y es operativo republicano desde hace tiempo
Para Donovan, el significado de la visita fue sobre “lo que está en las noticias de hoy y lo que estuvo en Tucker [Carlson] anoche y salir a buscarlo, más que el populismo y anticorporativismo”.
