Bad Bunny estrenó el jueves 18 de mayo Where she goes, un tema que además del nombre en inglés, solo pronuncia una frase en ese idioma, del resto toda la letra es en español.
El video, que dura cuatro minutos y medio, muestra a un Bad Bunny tejano con botas de vaquero y hebilla gigante, pero en vez de un sombrero tiene unas trenzas en el cabello y unos lentes blancos grandes.
La letra trata sobre un hombre que extraña la relación que tenía con una mujer, pero dice que por orgullo ella no quiere hablarle. A su vez, expresa lo que quiere hacer con la chica cuando por fin se encuentren.
A diferencia de Tormenta, la canción que grabó junto a la banda británica Gorillaz, o Un x100 to, en dúo con Grupo Firme, en las que entona letras sentimentales y sin palabrotas, en Where she goes Bad Bunny vuelve a su origen con líricas cargadas de referencias sexuales.
Por ejemplo, una de las estrofas dice: “¿Dónde está ese totito? Que lleva tiempo perdido. Si te digo que me gusta’, que estás buena, no lo tome’ por cumplido. Es que yo soy un bellaco, es que yo soy un atrevido, ey. Y hace tiempo que quiero chingar contigo”.
Además, la única parte en que pronuncia el inglés es para decir “I wanna feel that pussy again”, lo que en español significa “Quiero sentir ese coño otra vez”.
Este sencillo parece marcar otra etapa del artista puertorriqueño tras el éxito de su álbum Un verano sin ti. Al finalizar el video se ven unas tomas de apoyo que indican, al parecer, un abrebocas de un próximo tema.
Tal vez, las nuevas ambiciones de Bad Bunny estén centradas en conquistar al público norteamericano con letras en español. Así se apreció en los Grammys cuando abrió la ceremonia al ritmo de su éxito El Apagón, con el que puso a bailar merengue hasta a Taylor Swift.
Tras su show en los Grammys llovieron las críticas a CBS porque no subtituló correctamente cuando cantó ni cuando recibió el premio, en la pantalla solo decía “speaking non-english o singing in non-english”.
Tanto, que hasta el congresista demócrata Robert García le envió una carta al director ejecutivo de CBS, George Cheeks, y el rapero estadounidense 50 Cent expresó su descontento en Instagram.