Hace casi dos meses Estados Unidos prometió que “habrá consecuencias” por las acciones de Arabia Saudita para reducir la producción de petróleo, sin embargo, según funcionarios federales actualmente no está considerando ninguna represalia significativa contra el país.
Las relaciones entre Estados Unidos y Arabia Saudita se quebraron luego de que el país asiático presionó a los miembros de la OPEP a reducir la producción de petróleo en 2 millones de barriles diarios en la reunión del 6 de octubre.
Los funcionarios de la administración creen que la próxima reunión de la OPEP, que se celebrará este domingo 4 de diciembre, es otro punto de inflexión y que su resultado le dará a la administración de Biden una vía de escape a su promesa de sancionar a Arabia Saudita por el recorte de producción de octubre.
Los expertos también creen que se impondrá un acuerdo de costo para que Arabia Saudita aumente el precio del crudo si la OPEP recorta nuevamente la producción.
“Esta es una relación de ocho décadas y continuaremos evaluando las relaciones con Arabia Saudita de manera metódica y estratégica, y de acuerdo con lo que nos interesa”, comentó funcionario en un comunicado enviado a NBC News.
Desde octubre tanto los trabajadores de la Casa Blanca como los miembros del Congreso se han indignado con la decisión de Arabia Saudita. John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, comentó que los saudíes sabían que “aumentaría los ingresos rusos y atenuaría la efectividad de las sanciones”.
Mientras que los congresistas amenazaron con detener la venta de armas e incluso retirar las tropas estadounidenses tanto de Arabia Saudita como de los Emiratos Árabes Unidos.
Un funcionario de la administración explicó que si en la reunión de este domingo la OPEP decide recortar la producción nuevamente, la relación entre Estados Unidos y Arabia Saudita se pausará definitivamente.
Los declarantes aseguraron que mientras los precios de la gasolina se mantengan bajos las consecuencias que la Casa Blanca amenazó a principios de este otoño nunca se materializarán a menos que los miembros del Congreso cumplan sus promesas de tomar represalias.
Fuente principal de la noticia: NBC News.