Norma J. Torres, representante demócrata de California y miembro del Subcomité Estatal de Asignaciones a Operaciones Extranjeras de la Cámara Baja, dijo en una reciente audiencia que quería cortar toda la ayuda a los países del Triángulo Norte, que incluyen Guatemala, El Salvador y Honduras.
“Mis prioridades presupuestarias este año son desfinanciar a los tres países por completo de todos los programas”, dijo Torres a Samantha Power, directora de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) en una audiencia para solicitar presupuesto para la agencia en el año fiscal 2024.
“No sé cómo podemos mirar a un contribuyente estadounidense a la cara y decir… ‘lo que estamos haciendo es evitar que la gente venga al norte'”.
Torres dijo que le gustaría ver que la ayuda sea redirigida a apoyar a los países latinoamericanos que se enfrentan a la afluencia de inmigrantes de esas naciones, así como de Nicaragua y Venezuela, reseñó Roll Call.
“Preferiría trabajar con México para resolver cómo podemos proteger a esos niños pequeños, a esos solicitantes de asilo. Prefiero trabajar en países como Costa Rica, Panamá, Colombia, países sudamericanos que también están ayudando a los venezolanos a migrar”, dijo Torres, quien es originaria de Guatemala.
“Creo que el dinero estará mejor gastado reenfocandolo en otras áreas”, añadió.
Sobre la ayuda a la región
La solicitud de ayuda para Centroamérica que el gobierno está haciendo en el año fiscal 2024 incluye casi $740 millones para la agencia USAID.
- El financiamiento es parte de una estrategia que busca abordar las “causas de raíz” de la migración.
- A su vez, es parte de un plan más amplio que tiene previsto gastar $4 mil millones en un período de cuatro años en actividades destinadas a reducir la pobreza, la violencia y la corrupción en la región.
- Se apunta a que, al mejorar las condiciones de vida de las personas en el Triángulo Norte, esto conducirá a una menor migración a través de México hacia los EE UU.
En el año fiscal 2022, los agentes fronterizos registraron casi 521 mil migrantes del Triángulo Norte en la frontera sur, según un informe de política del Servicio de Investigación del Congreso.
¿Qué dicen?
“Le pediría que, antes de atrincherarse demasiado en esta posición o esta meta, me permita a mí personalmente o a nuestro equipo, con su personal, explicarle exactamente lo que estamos financiando en estos programas… en estos tres países”, dijo la directora de USAID a Torres.
- “Estamos hablando de programas de reducción de pandillas. Estamos hablando de, ya sabe, en áreas de alta emigración, inversiones significativas en educación. Estamos hablando de… combatir la violencia de género, de una manera que marca una diferencia significativa para cada individuo que se ve afectado”, añadió Power.
- La directora también dijo que no se está otorgando ni un dólar a los gobiernos, sino a la sociedad civil que les exige rendir cuentas, así como a los medios independientes y organizaciones anti-corrupción.
- Por otro lado, los republicanos ya han expresado dudas sobre si gastar más en ayuda al Triángulo Norte.
El Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes aprobó a inicios de mayo un proyecto de ley migratorio para América Central que exigiría “garantizar que los fondos de asistencia humanitaria y de desarrollo destinados a reducir la inmigración ilegal no se gasten en programas que no han demostrado reducir los flujos de inmigrantes ilegales en conjunto”.
Michael McCaul, representante republicano de Texas y presidente del Comité, quien además patrocinó el proyecto de ley, dijo en una entrevista que las decisiones de Honduras y de El Salvador de cambiar las relaciones diplomáticas de Taiwán a China han causado disgusto en la región.
“Guatemala está en una situación muy diferente”, agregó McCaul, ya que ese país todavía reconoce a Taipei y el gobierno todavía es “muy pro-Estados Unidos”.
Un desastre histórico
Carlos Ponce, profesor de la Universidad de Columbia, quien se enfoca en la gestión internacional de organizaciones sin fines de lucro en América Latina, dijo que esa teoría que se ha utilizado en las administraciones de Obama y Biden para sostener que la ayuda exterior debe enfocarse en las causas de raíz para abordar la migración es razonable, pero implementarlo ha sido “un desastre histórico”.
- “Estás hablando de problemas endémicos, problemas que han estado allí durante décadas”, dijo Ponce, exdirector de programas latinoamericanos de Freedom House, una organización de defensa sin fines de lucro.
- Como la ayuda de EEUU se estructura en ciclos de asignación, de dos y tres años, los proyectos tienen plazos breves para lograr sus objetivos.
Por otro lado, hizo crítica a lo que denominó una cultura de “búsqueda de rentas” en la comunidad de contratistas de ayuda extranjera y organizaciones sin fines de lucro.
Ponce calculó que la mitad de un contrato de ayuda se gasta en Washington en un proceso que denominó “corrupción legal”.
“Ineficiencia, burocracia, búsqueda de rentas y un mal sistema que solo está hecho para consultores y contratistas y organizaciones sin fines de lucro para retener la mayoría del dinero de los contribuyentes”, dijo Ponce. “Es disfuncional. No funciona y ellos [los beneficiarios] no quieren hacer nada al respecto”.