Aunque los más mayores de están adaptando a las nuevas tecnologías, la Generación Z ha desarrollado una fijación por objetos antiguos como las cámaras desechables, los pantalones y faldas de tiro bajo y los teléfonos plegables lanzados al mercado en la década de 1990.
Estos teléfonos básicos, livianos y pequeños, que cuestan alrededor de $20 en Amazon o Walmart, son protagonistas de videos en TikTok en los que se ve a los jóvenes abren las cajas y emocionados desempacan los dispositivos tal cual como lo hicieron los adolescentes hace 30 años atrás.
También hay tutoriales sobre cómo tomar fotografías con la cámara de estos teléfonos plegables. Los jóvenes alegan en redes sociales que compran estos celulares para desconectarse lo más posible del mundo, ya que tienen baja señal y escaso internet.
“Soy la de la revolución de los teléfonos plegables del grupo. Tal vez pueda escribir el tema principal”, aseguró Camila Cabello en una tuit publicado la semana pasada en el que subió una foto posando con un teléfono plegable TCL.
Mientras que la actriz Dove Cameron, formada en Disney, aseguró en una entrevista en noviembre que había comprado un teléfono de tapa porque pasar demasiado tiempo en su celular mirando redes sociales era “muy malo” para ella.
Los teléfonos plegables son un escape para la Gen-Z
Sammy Palazzolo, un estudiante de 18 años del primer año en la Universidad de Illinois Urbana-Champaign, contó a CNN que tiene una nueva actividad con sus amigos. Antes de ir de fiesta se arreglan escuchando música en sus teléfono inteligentes, pero cuando salen llevan sus teléfonos plegables.
Durante toda la noche se contactan a través de sus celulares de gama baja y toman fotos con las cámaras obsoletas.
Alegó que antes de cambiar el teléfono se dio cuenta cómo las salidas nocturnas terminaban en quejas y llantos por publicaciones no deseadas en las redes sociales.
Con esta práctica cree que se “elimina todas las cosas malas de la universidad y trae todas las cosas buenas de un teléfono como conectar con la gente y hacer fotos y videos”.
“Creo que la gente va a salir cada vez más con teléfonos plegables solo porque es muy divertido, nostálgico y, sinceramente, una vibra”, comentó al medio Reagan Boeder, otro joven de 18 años.
Un mercado que podría despegar
International Data Corporation, empresa que examina los mercados de consumo por dispositivos, aplicaciones, redes y servicios, informó en 2022 que espera que el mercado de teléfonos plegables alcanzará $29 mil millones en 2025 con un crecimiento anual del 70%.
En 2022 Samsung sacó al mercado más de 10 millones de unidades de celulares inteligentes plegables lo que representó más del 88% del mercado mundial de estos dispositivos.
Pero, a diferencia de los teléfonos conseguidos en Walmart a $20, Un Samsung Galaxy Z Fold4 cuesta $1 mil 799,99 y el Galaxy Z Flip4 en $999 mil 99.
“Samsung optó por apostar por sus smartphones plegables; una decisión que ha tomado está muy por delante de sus rivales en el número y las ventas de estos teléfonos”, declaró a CNN Zaker Li, analista principal del equipo de dispositivos móviles de Omdia.