El Grupo Wagner es una organización paramilitar que se cree está compuesta por mercenarios rusos, aunque es descrita como un servicio militar privado.
También son llamados PMC Wagner o ChVK Wagner. Sin embargo, su existencia no es reconocida en Rusia porque contratar servicio militar privado es ilegal, aunque tras bastidores el grupo ha sido aliado del presidente Vladimir Putin.
Debido a su conexión con los intereses y objetivos políticos exteriores de Rusia, presuntamente el Grupo Wagner recibe armamento militar y entrenamiento en instalaciones del Ministerio de Defensa o del Departamento Central de Inteligencia del país.
Su nombre deriva del apellido del fundador, Yevgeny Prigozhin, un empresario cercano a Putin que se ha visto involucrado en diversas controversias políticas y militares, y que en septiembre de 2022 admitió haber formado la organización paramilitar.
El Grupo Wagner se dio a conocer internacionalmente durante la invasión a Ucrania, donde apoyó a las fuerzas separatistas de las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk.
Medios han señalado que sus contratistas participaron en conflictos armados en Siria, Libia, Centroáfrica y Malí, luchando a menudo junto a las fuerzas afines al gobierno ruso. Se les acusa de cometer crímenes de guerra, incluyendo violaciones, saqueos y torturas a presuntos desertores.
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¿Por qué el régimen ruso es aliado del Grupo Wagner?
Además de ser descrita como una fuerza militar privada que trabaja en estrecha colaboración con el gobierno ruso, defensores de derechos humanos afirman que actúa como una especie de “ejército paralelo”.
Se cree que este grupo ha sido utilizado por Rusia en sus operaciones militares en el extranjero para evitar la implicación directa de las fuerzas militares rusas y para mantener un bajo perfil.
A pesar de la falta de información precisa sobre su estructura y operaciones, el Grupo Wagner ha sido objeto de sanciones internacionales por parte de la Unión Europea y los Estados Unidos, que lo acusan de ser responsable de violaciones de derechos humanos y de desestabilizar la seguridad en diversas regiones del mundo.
Rebelión armada contra Putin
Prigozhin informó la noche del viernes 23 de junio que el ejército ruso había llevado a cabo un ataque contra sus combatientes. Aseguró que encabezaría una “marcha de la justicia” contra sus enemigos, pero negó que estuviera dando un golpe de Estado.
En respuesta Putin, expresó el sábado que había ordenado a sus militares y fuerzas del orden que “castiguen” a quienes están detrás de “una rebelión armada”.
El Servicio Federal de Seguridad (FSB), principal agencia de seguridad de Rusia, acusó a Prigozhin de “incitación a la rebelión armada” y emitió una orden de arresto contra él.
Las fuerzas de Wagner cruzaron al sur de Rusia desde Ucrania, ingresando a Rostov-on-Don el sábado temprano.
Desde entonces ha habido informes de enfrentamientos en Voronezh, al norte de Rostov-on-Don. El Ministerio de Defensa británico informó que las unidades de Wagner parecían moverse hacia Moscú, que ha reforzado las medidas de seguridad.
