En las últimas semanas, se ha hablado de la posibilidad de que Estados Unidos caiga en default y quedarse sin dinero por no pagar lo que debe. Esto ocurre porque demócratas y republicanos no se han puesto de acuerdo en aumentar el techo de la deuda, es decir, el límite superior de dinero que el gobierno estadounidense puede pedir prestado.
Este medida fue introducida por el Congreso por primera vez en 1917 y significa que el gobierno no necesitaba la aprobación de los legisladores para cada deuda emitida.
Qué pasa si no se llega a un acuerdo por el techo de la deuda
De acuerdo con la secretaria del Tesoro de EE.UU., Janet Yellen, si no se eleva el techo de la deuda, “se producirá un caos financiero y económico,” declaró este domingo.
La falta de fondos de Estados Unidos obligaría al gobierno a priorizar el gasto, de modo que los pagos de la deuda y los pagos de intereses se realizarían primero.
- Eso significa que podrían ocurrir retrasos en el pago de salarios de millones de trabajadores del sector público, incluidos los docentes.
- Los pagos de seguridad social y los subsidios de atención médica para estadounidenses vulnerables, incluidos los veteranos militares, también podrían suspenderse.
Además, un incumplimiento en los pagos podría debilitar el comercio mundial y llevar al resto del mundo a una recesión, por una potencial caída del dólar estadounidense. Con esta situación, podría desatarse un escenario inflacionario y verse afectada la cadena de suministro.
Fecha clave: 1 de junio
Durante los últimos 70 años, el techo de la deuda se elevó 78 veces. Una de ellas fue en 2011, cuando la demora entre los partidos para establecer un nuevo límite hizo que el país perdiera calificación crediticia AAA, lo que provocó un aumento en los costos de endeudamiento.
En la actualidad, el techo de deuda se sitúa en 31,4 billones de dólares, cantidad que ya se alcanzó enero. En ese momento, el Departamento del Tesoro tomó “medidas extraordinarias” para poder seguir financiando las actividades del Gobierno.
La próxima fecha límite clave va a ocurrir a principios de junio. Los legisladores se han reunido entre ellos y con el presidente Biden para llegar a un acuerdo.
Para aumentar el techo de la deuda, los republicanos, quienes tienen mayoría en la Cámara de Representantes, quieren que la Casa Blanca acepte recortes en el gasto público y otras reformas fiscales.
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El poder del presidente
De no llegar a un acuerdo, Biden puede invocar la Enmienda 14 de la Constitución que establece que la “validez de la deuda pública de los Estados Unidos, autorizada por ley,… no será cuestionada”.
De acuerdo con analistas, el presidente puede acogerse al deber constitucional de evitar el incumplimiento. Sin embargo, el partido republicano ha advertido que Biden no puede actuar de forma unilateral y que la solución tiene que pasar por el Congreso.
