A inicios de febrero, el fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, abrió nuevamente una investigación sobre un pago de dinero que el expresidente Donald Trump hizo a una actriz porno a cambio de su silencio, poco antes de las elecciones presidenciales de 2016.
Bragg estableció un gran jurado al que se le ha estado presentando evidencia para probar si Trump violó las leyes de campaña.
Sin embargo, antes de cualquier detalle de la oficina de Bragg, Trump publicó un mensaje en el que advertía que sería arrestado en relación con la investigación en unos días.
Tras el mensaje de Trump, se informó que el fiscal había comunicado vía correo electrónico a su personal que “no tolerará los intentos de intimidar a nuestra oficina o amenazar el estado de derecho en Nueva York”.
Bragg dijo que su oficina se está coordinando con el Departamento de Policía de la ciudad de Nueva York y el tribunal para “garantizar que cualquier amenaza específica o creíble contra la oficina se investigue a fondo y que se implementen las medidas de seguridad adecuadas para que los 1,600 de nosotros tengamos un entorno de trabajo seguro”, según el correo electrónico, obtenido por Politico.
Un fiscal histórico
Bragg atrajo la atención nacional en 2021, cuando hizo historia al convertirse en el primer afroamericano en ser fiscal de distrito de la Oficina del Fiscal de Distrito de Manhattan.
- Antes de su juramentación, Bragg ya había trabajado en casos relacionados con Trump y otros nombres notables cuando era fiscal general adjunto del estado de Nueva York, reseñó CNN.
- Según dijo, ayudó a demandar a la administración Trump más de 100 veces, y también dirigió un equipo que demandó a la Fundación Donald J. Trump
- Esto resultó en que el expresidente pagara $2 millones a varias organizaciones benéficas y la disolución de la fundación.
Bragg también encabezó la demanda contra el productor de cine Harvey Weinstein y su compañía.
Nativo de Harlem, Nueva York, y educado en Harvard, el abogado se desempeñó anteriormente como fiscal federal adjunto en el Distrito Sur de Nueva York.
Bragg trabajó como abogado de derechos civiles y como profesor y codirector del Proyecto de Justicia Racial de la Facultad de Derecho de Nueva York.
Como parte del proyecto, Bragg representó a la madre de Eric Garner, un hombre negro de 43 años que fue asesinado por la policía en 2014, en un caso contra el Departamento de Policía de Nueva York, en un intento de que la policía de esa ciudad revelara más información sobre la muerte de Garner, reseñó Forbes.
De sufrir violencia policial a la escuela de derecho
Bragg, quien dijo que un oficial de policía le puso una pistola en la cabeza cuando tenía 15 años, ha hecho campaña por más iniciativas que promuevan la rendición de cuentas entre las agencias de seguridad.
- El abogado dijo que sus encuentros con la policía son la razón por la que decidió asistir a la facultad de derecho y convertirse en abogado de derechos civiles.
- Ha creado nuevas unidades en su oficina, incluida una División de Víctimas Especiales que se enfoca en delitos sexuales, trata de personas y violencia doméstica.
- También amplió la Unidad de Crímenes de Odio de la oficina con fiscales, investigadores y analistas adicionales, en un esfuerzo por promover el alcance comunitario y “generar confianza en la comunidad”.