La policía de Tampa se trasladó a una zona comercial de la ciudad debido a un disturbio causado por un caimán de 2,7 metros de largo que deambulaba por una calle cercana al estadio Raymond James, sede de los Tampa Bay Buccaneers.
El caimán agitó la cola varias veces cuando la policía se le acercó por primera vez y le pinchó con una barra extensible. Unos seis de agentes y una multitud de espectadores observaron cómo las luces de los coches patrulla parpadeaban en la calle bloqueada, según el vídeo de la cámara corporal difundido por el Departamento de Policía de Tampa.
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A continuación, el agente confeccionó un lazo con una cuerda amarilla y lo ató alrededor de la boca del caimán. Posteriormente un agente saltó sobre el animal para inmovilizar su cabeza, un segundo policía se posicionó sobre el cuerpo del caimán para que pudieran arrastrarlo.
El agente que mantenía cerrada la boca del caimán pidió a sus colegas una toalla para taparle los ojos y cinta adhesiva para envolverle la boca. También pegaron con cinta las patas del caimán.
Phil Walters, un trampero de caimanes contratado por el Programa de Caimanes Molestos de la Comisión para la Conservación de la Pesca y la Vida Silvestre de Florida que fue llamado para ayudar a los agentes, dijo que estaba impresionado con el trabajo realizado por los mejores de Tampa antes de llegar a la escena, reseñó AP.