La Corte Suprema apoyó el jueves al fotógrafo Lynn Goldsmith quien afirmó que el difunto artista plástico Andy Warhol debería haber respetado sus derechos de autor en una foto de la estrella de rock Prince al crear una imagen icónica del difunto cantante.
“Las obras originales de Lynn Goldsmith, como las de otros fotógrafos, tienen derecho a la protección de los derechos de autor, incluso contra artistas famosos”, expresó la jueza Sonia Sotomayor.
Siete de nueve jueces votaron a favor de Goldsmith. Solo discreparon la jueza Elena Kagan y el presidente del Tribunal Supremo John G. Roberts Jr.
“Al negarse a reconocer la importancia de la copia transformadora, la Corte hoy, y por primera vez, le da la espalda a cómo funciona la creatividad”, escribió Kagan.
El caso de la foto de Prince
Los jueces estaban considerando si Warhol, quien murió en 1987, violó la ley de derechos de autor al vender a la revista Vanity Fair una ilustración basada en un retrato serigrafiado de Prince.
La imagen se derivó de una foto del músico realizada por Lynn Goldsmith, pero utilizada sin su permiso, crédito o pago. Un juez de distrito federal en Nueva York argumentó que el trabajo de Warhol creó algo nuevo, una transformación dentro de la excepción de “uso justo” de la ley.
Goldsmith tomó el retrato de Prince a principios de la década de 1980. Vanity Fair le encargó a Warhol que creara una ilustración para un artículo de 1984 sobre Prince y obtuvo una licencia de Goldsmith, pagándole $400 para usar la foto como referencia artística para el ilustrador.
Cuando Prince murió en 2016, la empresa matriz de Vanity Fair, Condé Nast, pagó más de $10 mil a la Fundación Warhol por otra versión, Orange Prince, para ilustrar una revista conmemorativa. Goldsmith, no recibió un centavo por la foto y por eso inició la demanda.