La problemática de la plaga de ratas en París no cesa y parece que el Gobierno perdió la batalla en exterminarla. Al contrario, están llevando un plan para acostumbrarse a ellas sin que afecte la higiene de la ciudadanía.
En 2017 la administración municipal de París lanzó un proyecto en búsqueda de acabar con la reproducción de roedores en la ciudad. Sin embargo, los resultados no fueron los esperados, la inversión fue en vano y la problemática sigue en auge.
Los cubos de basura herméticos y el uso masivo de raticidas no han sido eficaces para eliminar la plaga. Por lo tanto, el Ayuntamiento está enfocándose más en la prevención que en la exterminación.
Sin embargo, el esfuerzo no ha dado frutos y la plaga está descontrolada. Por lo tanto, la alternativa que están buscando los funcionarios de la ciudad es no acabarla, sino encontrar el método para que los ciudadanos convivan con los roedores. La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, creó un comité para poner bajo estudio la cohabitación entre los habitantes de la capital francesa con los aproximados seis millones de ratones.
En ese orden de ideas, Anne Souyris, vicealcaldesa de salud pública, convocó al Alto Consejo de Sanidad Pública para que asesore el proyecto y sea el encargado de evaluar si los roedores implican un problema serio de salubridad.
“Hemos decidido junto con la señora alcaldesa crear un comité sobre la cuestión de esta convivencia. Ser lo más eficaces posible y conseguir que no sea insoportable para los parisinos”, declaró la funcionaria según medios internacionales.
El primer paso de este programa se dio en una reunión entablada entre la administración municipal y el alcalde del distrito XVII de París, Geoffroy Boulad, en la cual se planteó un plan para hacerle frente a la proliferación de las ratas.
Diferencias de opiniones
La presencia de poblaciones de ratas marrones en París, ha sido objeto de controversia que se ha intensificado en los últimos meses. En particular, la esfera pública ve afirmaciones contradictorias sobre los riesgos que las ratas marrones podrían representar para la salud humana.
“La Academia Nacional de Medicina, por ejemplo, afirmó en un comunicado de prensa de julio de 2022 que las ratas eran vectores de enfermedades y constituían un ‘peligro real para la salud pública’. Por el contrario, otros expertos como la profesora Christiane Denys afirmaron que ‘los riesgos para la salud asociados a las ratas son escasos, siendo casi nula la probabilidad de ser mordido porque el roedor tiende a huir de los humanos’”, indicó Anne Souyris en un comunicado vía Twiiter.
Por otra parte, precisó que el principal peligro radica en la contaminación de los alimentos no consumidos manchados con orina o excremento. Y que en estos casos existe el riesgo de salmonelosis y, más raramente, de leptospirosis, también llamada enfermedad de los trabajadores de las aguas residuales.
“A la fecha no existe ningún dictamen o informe que permita caracterizar los problemas de salud de la presencia de ratas marrones en la ciudad e implementar políticas públicas en consecuencia. Convencido de que la información clara y bien informada por la experiencia científica, es beneficiosa para el debate público. Y es la única que permite establecer los problemas de salud de los animales preliminares”, finalizó en su comunicado.