Trabajadores del gobierno de Estados Unidos sufrieron represalias por plantear preocupaciones del trato que recibían niños migrantes no acompañados en una base militar en Texas, según el informe de un organismo de supervisión gubernamental publicado este martes.
Al menos dos empleados del gobierno dijeron que fueron degradados y removidos de sus puestos de trabajo después de alertar sobre las condiciones en un sitio temporal de emergencia para atender a los niños no acompañados ubicado en Fort Bliss, Texas.
El informe, realizado por la Oficina del Inspector General del Departamento de Salud (HHS, por sus siglas en inglés), se realiza ante el aumento del ingreso de niños no acompañados a Estados Unidos: de mil 929 niños en octubre de 2020, pasaron a atender 20 mil 339 niños en abril de 2021.
Represalias. Los niños están bajo el cuidado de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR, por sus siglas en inglés), que está adscrita al HHS. Este ente abrió 14 sitios temporales para atender la demanda de niños no acompañados.
- El primer empleado del gobierno era parte del equipo del liderazgo de la ORR. Fue degradado y transferido después de plantear inquietudes a sus supervisores sobre la seguridad de los niños en estos sitios temporales y su preocupación sobre una medida que eliminaría algunos controles en el proceso de selección de patrocinantes.
- La segunda persona que experimentó represalias, según el informe, fue un empleado federal de una agencia ajena al HHS asignado temporalmente al equipo de gestión de casos en Fort Bliss, Texas. Señaló la falta de actualizaciones en la administración de casos a través de un buzón de sugerencias. Luego del envío, fue despedido de esta asignación temporal.
Ambiente de temor. Miembros del equipo que trabajaba en Fort Bliss señalaron que tenían temor de plantear inquietudes sobre la gestión de los casos y la seguridad de los niños por miedo a represalias.
- “Tengo la impresión de que ha habido algunos [despidos] que parecen ser una represalia cuando las personas expresan quejas o preocupaciones. Se me ha pasado por la cabeza más de una vez al enviar un email”, dijo un miembro del personal al respecto.
- Otro miembro del equipo señaló que escuchó que empleados de la instalación habían recibido mensajes que amenazaban con despedirlos si continuaban planteando problemas. También hay otras personas que indicaron que se sentían desanimados de indicar sus preocupaciones.
- El informe señala que las represalias pudieron crear una “cultura de miedo”, asustando al personal para evitar que presenten quejas o irregularidades.
Otros detalles. El informe también señala que la inauguración apresurada de este centro temporal en Fort Bliss para atender a niños no acompañados impidió la capacidad de la ORR de tener administradores experimentados y brindar capacitación adecuada.
- Por lo tanto, algunos niños debieron esperar semanas entre las actualizaciones de sus casos, lo que les causó ansiedad, angustia y, en algunos casos, ataques de pánico.
- Advirtió que una guía del ORR para acelerar la salida de los niños del sitio temporal, eliminó salvaguardas que pudieron haber aumentado el riesgo de que fuesen entregados a patrocinantes inseguros.
Fuente principal de la noticia: Reuters