Un riñón de cerdo genéticamente alterado fue trasplantado a un hombre con muerte cerebral y ha seguido funcionando durante 32 días, un avance hacia el posible uso de órganos animales en humanos, informaron el miércoles cirujanos de la Universidad de Nueva York.
El riñón no fue rechazado en los minutos posteriores al trasplante, un problema en el xenotrasplante, un problema se sucede frecuentemente con órganos de una especie diferente.
Los médicos aseguraron en una rueda de prensa que el órgano comenzó a producir orina y asumió las funciones de un riñón humano, como filtrar toxinas.
Este miércoles también investigadores de la Facultad de Medicina Heersink de la Universidad de Alabama en Birmingham publicaron un estudio de caso similar, de un paciente con muerte cerebral que recibió dos riñones de cerdo que sufrieron 10 alteraciones genéticas a principios de este año.
En este paciente los riñones no fueron rechazados y continuaron funcionando durante siete días. Los resultados fueron revisados por otros expertos y publicados en la revista JAMA Surgery.
Las dos cirugías de trasplante brindan la esperanza de cerrar algún día la enorme brecha entre la oferta y la demanda de riñones al demostrar que estos órganos de cerdo pueden mantener la función humana normal durante un período prolongado de tiempo.
Hasta que se dieron a conocer los nuevos resultados el miércoles, eso no se había demostrado, según los cirujanos involucrados y otros expertos.
“Esta es la primera vez en la historia que alguien ha podido demostrar que un riñón de cerdo genéticamente modificado es capaz de mantener la función renal que sustenta la vida”, expresó a The Washington Post Jayme E. Locke, autor principal de la investigación de JAMA Surgery.
Este avance científico podría aliviar la lista de espera de trasplantados
El miércoles, 103 mil 479 personas estaban en lista de espera para trasplante de órganos en Estados Unidos, de las cuales 88.651 buscaban riñones, según datos de la United Network for Organ Sharing (UNOS).
En 2022, 26 mil pacientes recibieron trasplantes de riñón, según NYU Langone Health.
Muchas personas mueren después de esperar años por un riñón y otras se enferman demasiado para recibir un trasplante. Algunos nunca llegan a la lista de espera.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales, alrededor de 808,000 estadounidenses viven con enfermedad renal en etapa terminal, el 69% de ellos en diálisis y el resto con trasplantes.
Los riñones, al igual que los hígados, pueden obtenerse de donantes vivos y fallecidos, que deben coincidir con los receptores en diversas medidas de idoneidad.
Los avances críticos informados el miércoles fueron la capacidad de los riñones de cerdo trasplantados para concentrar la orina y eliminar la creatinina, un subproducto de la función muscular que es tóxico si se acumula en el cuerpo humano, aseguró Locke.
La experta señaló que el experimento de la Universidad de Alabama en Birmingham podría haber durado más, pero terminó por solicitud de la familia del difunto.
“Este es un paso crítico hacia los ensayos clínicos en pacientes vivos porque puede proporcionar evidencia de una función fisiológica normal a más largo plazo sin rechazo”, expresó David Klassen, director médico de UNOS.