Los republicanos del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, liderado por el representante Jim Jordan, republicano de Ohio, celebraron su primera audiencia, enfocándose en lo que han denominado una crisis en la frontera sur.
La audiencia, llamada “La crisis fronteriza de Biden – Parte I”, es la primera de, aparentemente, muchas otras en las que los republicanos tienen planeado hacer un escrutinio del manejo del presidente Joe Biden sobre la frontera.
Jordan y otros republicanos en el comité han culpado a la administración de Biden por el número récord de detenciones de inmigrantes en la frontera en los últimos dos años, aun cuando el presidente ha mantenido algunas de las políticas fronterizas clave del expresidente Donald Trump, incluido el Título 42, la normativa sanitaria que expulsa de forma inmediata a los migrantes sin oportunidad de pedir asilo.
Algunos miembros del partido rojo también se han hecho eco de la narrativa que habla de una “invasión de migrantes” o de que drogas, como el fentanilo, se introducen como contrabando en la frontera, con los migrantes como parte de esto.
Durante la audiencia, los republicanos trataron de presentar el aumento de inmigrantes como una amenaza para las comunidades de todo el país, mientras que los demócratas los acusaron de infundir miedo y difundir información errónea, reseñó NPR.
Dos fronteras distintas
“Está abierta. La frontera es peligrosa”, dijo el representante Andy Biggs, republicano de Arizona. “Llueven las drogas, terroristas internacionales, miembros de bandas criminales, gente de todo el mundo”.
- Biden difiere con que la frontera está abierta y que sus más recientes medidas han contribuido a disminuir los cruces irregulares. Sin embargo, como ningún miembro de la administración fue llamado a testificar, los demócratas le defendieron.
- “La administración de Biden en realidad expulsó a más de 1,1 millones de personas el año pasado. Y recientemente amplió el uso del Título 42, para gran preocupación de muchos de nosotros en el comité”, dijo el representante demócrata Jerrold Nadler, de Nueva York, quien calificó la audiencia como “teatro político”.
- Se oyeron testimonios del padre de un joven que murió de sobredosis de fentanilo y fundó una organización, pero aunque ambos lados expresaron condolencias y empatía, la argumentación detrás causó disonancia entre los representantes.
- Los demócratas señalaron que la gran mayoría de las incautaciones de fentanilo ocurren en los puertos de entrada oficiales, a menudo en vehículos conducidos por ciudadanos estadounidenses, desestimando la retórica de que la droga llega a través de los migrantes en contrabando.
El comité también escuchó a un par de autoridades y jueces de las comunidades fronterizas, quienes pintaron imágenes marcadamente diferentes de la situación actual.
El alguacil Mark Dannels del condado de Cochise, en el sur de Arizona, decía que la frontera “es la peor que he visto” y que los recursos son escasos para la Patrulla Fronteriza.
Por su parte, el juez del condado de El Paso, Ricardo Samaniego, inició su participación enfatizando que la frontera no estaba abierta y que no había una invasión de migrantes.
Samaniego dijo que los funcionarios locales y las organizaciones sin fines de lucro han estado trabajando de cerca durante años con la Patrulla Fronteriza y otras autoridades de inmigración, y han desarrollado una estrategia viable para lidiar con el gran número de migrantes que buscan protección en los Estados Unidos.
“El humanitarismo y la seguridad no son una opción binaria. Es responsabilidad del gobierno federal hacer ambas cosas”, dijo Samaniego.
En varias ocasiones, los republicanos apuntaron a que los demócratas estaban instando a que los migrantes cruzaran la frontera. El representante republicano de Texas, Chip Roy, incluso señaló que se trataba de “una invasión”.
NPR explica que el término se vincula a una teoría de conspiración referida como “Teoría de Sustitución”, que indica que los demócratas están tratando de sustituir a los americanos blancos con inmigrantes para ganar poder político.
“No hay una invasión de migrantes en nuestra comunidad. Tampoco hay hordas de inmigrantes que cometen delitos contra los ciudadanos o causan estragos en nuestra comunidad”, dijo Samaniego. “Afirmar esto continúa una narrativa racista falsa”.