El gobernador de California, Gavin Newsom, anunció el viernes que ya no pedirá al Tribunal Supremo estadal que bloquee las solicitudes de la seguidora de Charles Manson, Leslie Van Houten, quien lleva 53 años en prisión acusada de dos asesinatos.
En un breve comunicado, la oficina del gobernador dijo que era poco probable que el alto tribunal del estado considerara una apelación de un fallo de un tribunal inferior que Van Houten debería ser liberada. El gobernador Gavin Newsom está decepcionado, según el comunicado.
“Más de 50 años después de que el culto de Manson cometiera estos brutales asesinatos, las familias de las víctimas todavía sienten el impacto”, dice el comunicado.
Van Houten, quien ahora tiene 70 años, cumple cadena perpetua por ayudar a Manson y otros seguidores en los asesinatos en 1969 de Leno LaBianca, un tendero de Los Ángeles, y su esposa, Rosemary.
Van Houten sería puesta en libertad en unas dos semanas, después de que la junta de libertad condicional revise su expediente y tramite los papeles para su salida de la Institución para Mujeres de California, en Corona, dijo su abogada Nancy Tetreault.
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Fue recomendada para libertad condicional cinco veces desde 2016, pero Newsom y el exgobernador Jerry Brown rechazaron todas esas recomendaciones.
Sin embargo, un tribunal estatal de apelaciones dictaminó en mayo que Van Houten debía ser liberada, destacando lo que llamó sus “extraordinarios esfuerzos de rehabilitación, perspicacia, remordimiento, planes realistas de libertad condicional, apoyo de familiares y amigos” e informes de comportamiento favorables mientras estaba en prisión.
Tras su puesta en libertad, Van Houten pasará alrededor de un año en un centro de reinserción social, donde aprenderá habilidades básicas para la vida, como ir al supermercado y obtener una tarjeta de débito, explicó Tetreault.
Van Houten y otros seguidores de Manson mataron a los LaBianca en su casa en agosto de 1969 y después mancharon las paredes con su sangre. Van Houten describió más tarde cómo sujetaba a Rosemary LaBianca con una funda de almohada en la cabeza mientras otros la apuñalaban, antes de apuñalar ella misma a la mujer más de una docena de veces.