Los incendios forestales de Maui han dejado a 850 personas desaparecidas, según anunció el alcalde Richard Bissen.
La autoridad también reveló durante una transmisión en Facebook que el número de víctimas mortales asciende a 114, lo que lo convierte en el incendio forestal más mortífero de la historia contemporánea de Estados Unidos.
El alcalde Bissen indicó que se han confirmado las identidades de 27 de los fallecidos y se ha notificado a 11 familias su pérdida. La misión de identificar a las víctimas y localizar a los desaparecidos continúa, y los equipos de búsqueda y recuperación rastrean rigurosamente las ruinas de los edificios y vehículos calcinados.
Bissen aclaró que la cifra de 850 desaparecidos se calculó mediante la consolidación y el perfeccionamiento de varias listas del FBI de personas desaparecidas. La lista inicial de más de 2 mil desaparecidos se ha reducido considerablemente.
Más de 1 mil 285 personas que figuraban anteriormente como desaparecidas han sido localizadas y se ha confirmado que se encuentran a salvo, en gran parte gracias al restablecimiento de las comunicaciones móviles, lo que ha permitido a las personas volver a ponerse en contacto con sus familias.
Lograr un recuento exacto de víctimas en una catástrofe tan generalizada puede ser un proceso lento, que a menudo se prolonga durante meses o incluso años, como afirman los expertos de los campos de la investigación de catástrofes y la antropología forense.
Lynn Goldman, epidemióloga y decana de la Escuela de Salud Pública del Instituto Milken de la Universidad George Washington, subrayó la complejidad de la tarea.
“Todavía estamos intentando averiguar quién estaba en la zona durante el incendio y quién ha desaparecido”, afirmó a NBC News. Esto incluye no sólo a los residentes locales de Lahaina, sino también a turistas y transeúntes.
Goldman observó además que el recuento de víctimas siempre está sujeto a modificaciones. Predice que la búsqueda de restos se prolongará durante un largo periodo.
Para acelerar la identificación de las víctimas, el FBI ha puesto en marcha recientemente una plataforma para que los particulares envíen muestras de ADN. Estas muestras se compararán con los restos que se han descubierto hasta ahora, lo que servirá de ayuda crucial en el proceso de identificación de las víctimas.
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