Joseline Peña-Melnyk es ejemplo perfecto de una afrolatina que llega lejos para beneficio de su comunidad. Faltaría papel y tinta para escribir sobre las leyes e iniciativas que tienen su firma durante los últimos 16 años, como delegada estatal en Maryland.
Desde el año pasado dirige el Comité de Salud de la Cámara Baja (House of Delegates) en la Asamblea General de Maryland. Es la primera afrolatina al frente de esta comisión que se encarga de proponer regulaciones a los precios de las medicinas, hasta conseguir que las mujeres inmigrantes indocumentadas y sus bebés reciban atención prenatal y de postparto.
“Esa ley, con ayuda del caucus latino y de otras organizaciones, la aprobamos el año pasado. Este tiempo ha sido para adaptar el sistema y a partir de este mes de julio, al fin las inmigrantes sin seguro y sin documentos recibirán atención y cuidados médicos durante el embarazo, el parto y un año después del alumbramiento. El gobierno federal financiará el 65% y el estado 35%”, dice Peña-Melnyk.
Para esta representante, nacida en República Dominicana y criada en Nueva York, “humildemente es un honor y una responsabilidad enorme dirigir la comisión de salud, porque hay que mover propuestas que facilitan a la gente tener acceso a un doctor, a una clínica o a las medicinas y eso me lo tomo muy en serio”, asegura.
En Maryland, unas 350 mil personas no tienen seguro médico, de ellas 250 mil son indocumentadas, muchas con enfermedades crónicas y que no son elegibles para ayudas federales o estatales.
Maryland a partir de este año será el primer estado de la unión en tener una junta que revisará los costos de los medicamentos. “Muchos deben decidir si pagan la renta, compran comida o medicinas. El gobierno no ha hecho nada para regular el importe de los medicamentos, por eso introduje la creación de este grupo y otros estados nos están siguiendo”, señala Peña-Melnyk.
La junta que acaba de empezar, analizará los costos y recomendará cuánto debe pagar Maryland por las medicinas, así como se hizo con otra ley que también tiene el sello de Peña-Melnyk: la reducción del precio de la insulina.
“El gobierno federal reguló el valor para los pacientes de Medicare, en Maryland lo hicimos para todos y no pagan más de $30. Cuando la junta haga su trabajo vamos a ver la diferencia de precios en más medicamentos”, es su aspiración.
Una elusiva aspiración
El período legislativo de 2023 eludió los deseos de Peña-Melnyk de expandir el acceso a un seguro médico a más inmigrantes. La propuesta era que ellos pudieran comprar seguros médicos en el mercado público del estado.
La iniciativa fue rechazada en el comité de finanzas del Senado; sin embargo, ella no se da por vencida y su comisión volverá a introducir la propuesta el próximo año. Desde ya está buscando aliados y educando a la comunidad, a los delegados y senadores sobre lo bueno que es para la economía de Maryland reducir el número de personas sin seguro médico.
“En las próximas semanas tendremos reuniones con los hospitales y las clínicas. Les estoy pidiendo que tomen una posición más fuerte con relación a nuestro plan”, señala Peña-Melnyk. Según sus estadísticas en 2022, el sistema hospitalario tuvo costos de entre $120 y 150 millones por cuidados no compensados; en 2021, más de $300 millones se quedaron sin restitución. Muchos de esos gastos son de vistas a emergencias por pacientes no asegurados.
De niña pobre a líder respetada
La historia de Peña-Melnyk es la de una niña dominicana, hija de madre soltera, muy querida por sus abuelitos, quienes pese a sus sacrificios no siempre tenían que poner en la olla para ella y su hermana.
Alguien con esos orígenes entiende la urgencia de universalizar el derecho a la salud, la educación, vivienda y seguridad alimentaria. “Esta responsabilidad que me dan los votantes me la tomo a pecho. Se supone que es un trabajo de medio tiempo, pero yo laboro siete días a la semana, porque siendo inmigrante conozco los esfuerzos que hacen para llegar hasta aquí y si me han dado la oportunidad de llevar su voz y mi experiencia a la mesa tengo que hacerlo”, es su explicación.
A Peña-Melnyk no se le olvida que su madre necesitó de la asistencia social para criar a sus niñas. Cuando se graduó del colegio, fue la primera en ir la universidad, obtuvo un doctorado en leyes y trabajó en Oficina del Fiscal General de Estados Unidos.
En ese intento de mejorar la vida de los inmigrantes, la comisión encabezada por Peña-Melnyk logró pasar hace poco una ley permanente para quienes no tienen seguro social y pagan impuestos con el número individual de contribuyente (ITIN). Unos 89 mil trabajadores pagan al estado $140 millones y a partir del próximo año podrán reclamar varios miles de dólares por concepto de créditos tributarios.
Licencias ocupacionales
“Lo bueno es que, aun siendo pocos, el caucus latino (son seis delegados de ascendencia hispana) es muy activo y hemos logrado que nos respeten”, dice esta líder. Aparte de ellos, Peña-Melnyk consiguió aumentar las membresías a 82 representantes de organizaciones que asisten a las reuniones y ejercen presión a favor de las propuestas legislativas que favorecen a la comunidad latina.
Una de esas últimas leyes, introducidas por el Comité de Salud y que contó con el respaldo del caucus latino, beneficia a quienes estudiaron carreras relacionada con salud en sus países y que aquí trabajan en el sector de cuidados, pero por falta de un número de seguro social no pueden aplicar para obtener licencias ocupacionales.
“Esta es una ley solo para quienes trabajan en cuidados médicos. A partir de este año ya pueden solicitar una licencia ocupacional. No sabemos cuántos se acogerán, lo que sí sabemos es que muchos latinos trabajan en área de salud”, asegura Peña-Melnyk.
Por las embarazadas y sus bebés
Hablando de su hoja de vida legislativa, Peña-Melnyk cuenta que son tantas leyes que “hasta se me olvidan”, comenta. Una que, le viene a la memoria porque le da muchas satisfacciones es la de Equidad para Bebés Sanos (Healthy Babies Equity Act), aprobada el año pasado.
“Fue un orgullo – dice – ser parte de ese rompecabezas, muchos grupos la apoyaron, yo solo fui un pedacito para un impacto enorme a favor de las embarazadas y sus bebés”. Desde el próximo mes ya comenzarán a recibir atención médica. Unos $80 millones cubrió el estado de Maryland para atender las emergencias del parto.
El tema de los derechos reproductivos también es de interés en su comité, el mismo que consiguió que la papeleta electoral de las elecciones presidenciales de 2024 se consulte a los votantes sobre la enmienda Dobbs. “La Corte Suprema dejó a cada estado introducir reformas, porque esto no se trata del aborto, sino del uso de los anticonceptivos, la vasectomía, la pastilla del día después, se trata de la salud y protección de las mujeres”, argumenta.
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