Alabama está a punto de convertirse en el primer estado en emplear la hipoxia de nitrógeno como método de ejecución de presos condenados a muerte.
La oficina del fiscal general de Alabama pidió el viernes a la Corte Suprema del estado que fije la fecha de ejecución de Kenneth Eugene Smith, un condenado a muerte de 58 años.
Las peticiones indican que Alabama planea utilizar la hipoxia nitrogenada -un método de ejecución legalizado, pero no aplicado en tres estados- para la ejecución de Smith.
La hipoxia por nitrógeno provoca la muerte al hacer inhalar a la persona el gas puro, privándola así del oxígeno.
El nitrógeno, que constituye el 78% del aire que respiramos, es inofensivo mezclado con oxígeno. Los partidarios de este procedimiento sostienen que es indoloro, mientras que sus detractores lo comparan con una forma de experimentación humana.
En 2018, Alabama aprobó la hipoxia nitrogenada como procedimiento de ejecución, impulsada por la escasez de fármacos para la inyección letal. Sin embargo, el estado no tenía intención de poner en práctica este método hasta ahora.
Oklahoma y Misisipi también han aprobado las ejecuciones por hipoxia de nitrógeno, pero aún no lo han puesto en práctica.
La decisión de Alabama de ejecutar con nitrógeno
Se espera que la intención de Alabama de poner en marcha la hipoxia nitrogenada desencadene una nueva oleada de impugnaciones legales sobre la legitimidad constitucional del método.
La Equal Justice Initiative, un grupo de defensa legal que ha trabajado en temas de pena de muerte, ha criticado el historial de Alabama de “ejecuciones e intentos de ejecución chapuceros y defectuosos” y ha calificado de idea horrenda el empleo de un método que no ha sido probado en absoluto.
“Alabama no está en condiciones de experimentar con un método de ejecución que no se ha probado ni utilizado en absoluto”, señaló Angie Setzer, abogada de la Iniciativa por la Igualdad de Justicia, señalando que ningún otro estado ha ejecutado a una persona mediante hipoxia nitrogenada.
Anteriormente, Alabama intentó ejecutar a Smith mediante inyección letal, sin conseguirlo, debido a complicaciones en la inserción de una vía intravenosa en sus venas.
Este fue el tercer intento fallido desde 2018. Tras la ejecución fallida, la gobernadora Kay Ivey detuvo todas las ejecuciones para reevaluar los protocolos de inyección letal. El estado reanudó las inyecciones letales el mes pasado.
El delito de Kenneth Smith
Smith, declarado culpable del asesinato por encargo de la esposa de un predicador en 1988, ha estado en el corredor de la muerte durante aproximadamente 35 años. El fiscal general Steve Marshall calificó de “parodia” que Smith haya conseguido eludir su condena a muerte durante tanto tiempo.
Alabama lleva varios años desarrollando el procedimiento de ejecución por hipoxia de nitrógeno, aunque los detalles de sus planes siguen siendo secretos. El Comisario de Instituciones Penitenciarias, John Hamm, anunció el mes pasado que el protocolo está casi finalizado.
Varios condenados a muerte de Alabama, entre ellos Smith, han sugerido que se les dé la opción de elegir la hipoxia nitrogenada en lugar de la inyección letal.
Elizabeth Sennett, la víctima del asesinato, fue encontrada muerta en su residencia del condado de Colbert, en Alabama, en 1988.
Los fiscales revelaron que Smith fue uno de los dos hombres a los que se pagó mil dólares para asesinar a Sennett por orden de su marido, que estaba muy endeudado y pretendía beneficiarse de los seguros.
El otro hombre condenado por el asesinato fue ejecutado en 2010. Este caso perturbó profundamente a la pequeña comunidad del norte de Alabama.