Los estrictos límites que impuso Tennessee a los espectáculos públicos de drag queen no entrarán en vigor este sábado, después de que un juez federal dictara una pausa temporal en la ejecución de la normativa. La decisión da la razón a una compañía teatral que alegaba que la ley viola la Primera Enmienda.
La normativa, pionera en Estados Unidos, prohibía los espectáculos de drags queen en lugares públicos o en sitios donde pudiera haber menores. Se preveía una pena de delito menor y un delito grave en caso de reincidencia.
Pero una organización con sede en Memphis, que recauda fondos para la comunidad LGBTQ+, argumentó que la ley no era clara en lo que se refiere a qué tipos de conductas están prohibidas o lo que significará para los espectáculos de drag.
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La ley estatal se refiere a los artistas como “imitadores masculinos o femeninos” y dice que se aplica a las actuaciones que son “perjudiciales para los menores” sin “valor artístico”.
La normativa estará detenida 14 días según dictaminó el juez de distrito Thomas Parker. Estuvo de acuerdo con la compañía de teatro en que la ley es vaga y excesivamente amplia, y escribió que Tennessee no había presentado un argumento convincente de por qué la ley era necesaria.
“Si Tennessee desea ejercer su poder policial para restringir la expresión que considera obscena, debe hacerlo dentro de las limitaciones y el marco de la Constitución de los Estados Unidos”, escribió Parker. “Cuando la legislatura aprobó este Estatuto, erró el tiro”.
Parker también cuestionó las especificaciones de ubicación.
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“¿Cuenta la residencia privada de un ciudadano? ¿Y un camping en un parque nacional?”. escribió Parker. “En última instancia, el amplio lenguaje del Estatuto choca con las estrictas restricciones de la Primera Enmienda”.
La demanda se dirigió al Estado y al fiscal superior del condado de Shelby, Steve Mulroy, quien señaló ante el tribunal que no se oponía a una pausa temporal.
