¿Los demócratas no perdieron tanto como esperaban o los republicanos ganaron menos de lo que proyectaron? Las elecciones de medio término se consideran una evaluación de la administración en turno y aunque Joe Biden venía con mínimos históricos de aprobación para un presidente, eso no parece haber hecho mella en los resultados del Partido Demócrata.
Según las proyecciones, los demócratas han logrado contener lo que se vendió como una marea roja y Republicana que arrasaría con la poca aprobación de la administración Biden.
Hasta el momento, aunque los republicanos han recuperado escaños en el Congreso el avance no ha sido tan efectivo como se esperaba y la lucha por el control del órgano legislativo se muestra descarnada.
La Cámara de Representantes
En la Cámara de Representantes —aunque hasta el momento los escaños están divididos en 194 republicanos y 166 demócratas— ninguno de los partidos ha logrado obtener los 218 escaños necesarios para ser mayoría.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (demócrata de California), dijo el miércoles por la mañana que los demócratas están “superando con creces las expectativas”, pero señaló que varias contiendas siguen siendo demasiado reñidas para declarar un ganador.
“Aunque muchas elecciones siguen siendo demasiado reñidas, está claro que los miembros y candidatos demócratas de la Cámara de Representantes están superando con creces las expectativas en todo el país”, dijo Pelosi en un comunicado.
Los republicanos siguen siendo favoritos para ganar el control de la Cámara, según The New York Times, que da al partido un 84% de posibilidades.
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Sin embargo, los demócratas se han anotado victorias en Virginia con Abigail Spanberger y Jennifer Wexton quienes fueron reelectas. El representante Vicente González (D), derrotó a la representante Mayra Flores (R) en el distrito 34 del Congreso de Texas.
En Rhode Island, el demócrata Seth Magaziner derrotó al republicano Allan Fung en un escaño abierto que actualmente ocupa el representante demócrata Jim Langevin, ya retirado. El distrito se consideraba inclinado hacia el Partido Republicano.
Aunque no todo fueron buenas noticias para la bancada demócrata de la Cámara de Representantes: la diputada Elaine Luria (demócrata) fue derrotada en el 2º distrito del Congreso de Virginia por la senadora estatal Jen Kiggans (republicana).
La lucha por el Senado
En el Senado las proyecciones hasta el momento perfilan que los demócratas llevan una ligera ventaja, por un escaño más el voto de desempate de Kamala Harris, a los republicanos.
Los demócratas también lograron importantes victorias fuera de la Cámara. Se prevé que el vicegobernador John Fetterman (demócrata) derrotó al republicano Mehmet Oz en la reñida carrera por el Senado de Pensilvania.
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Nevada, Arizona y Georgia aún están en disputa, aunque en el caso de Nevada los votos parecen que van a favorecer a los republicanos, mientras que en Arizona y Georgia son los demócratas quienes tienen la posibilidad de mantener el control.
En Nevada los resultados podrían tardar varios días en llegar a una conclusión. Lo mismo en Nevada donde Maricopa vuelve a ser el centro de atención debido a los retrasos que causaron unas máquinas de votación que estaban generando errores.
La ola que no fue
Algunos republicanos se dieron cuenta rápidamente de que la ola roja que muchos habían pronosticado no se estaba consolidando. El senador Lindsey Graham (republicano de Carolina del Sur), durante una entrevista con NBC News, dijo que “definitivamente no es una ola republicana, eso es seguro”.
“La ola roja no sucedió. Los republicanos y los independientes se quedaron en casa. No se quejen de los resultados si no hacen su parte”, escribió en Twitter Mayra Flores, una republicana de Texas que buscaba volver a Washington y fracasó en el intento.
Según POLITICO esta vez el expresidente Donald Trump no sumó votos con su apoyo, al contrario: restó a los candidatos a los que expresó un espaldarazo.
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Los republicanos que se han alejado de Trump salieron con mejores resultados en sus propias contiendas (como el caso de Ron DeSantis) con respecto a aquellos que como JD Vance ganaron pero no con la contundencia esperada.
El medio especializado advierte que el extremismo de los republicanos pudo haber sido una de las razones que detuvo la esperada ola. A los republicanos les perjudicó que el aborto ocupara un lugar destacado en la lista de preocupaciones de los votantes, justo por detrás de la inflación.
Sin embargo, algunos votantes tampoco consideran a los demócratas como razonables. De hecho, una encuesta publicada meses previos a las midterms reveló que la mayoría de los estadounidenses piensan que ninguno de los partidos se preocupa por ellos.
El panorama con una mayoría republicana podría ser sombrío, advierte POLITICO, sobre todo porque algunos analistas advierten que los miembros del GOP que ascienden al poder son de los más extremistas e incluso asoman la posibilidad de que se prohíban algunos derechos —como el aborto— a nivel nacional, además de que sea puesto en la conversación la retirada de Estados Unidos de Afganistán, los negocios de Hunter Biden y la respuesta al COVID-19.