Si solo tienes unos segundos, lee estas líneas:
- Desde nuestro historial de búsquedas en Google o sitios visitados en Maps a las conversaciones privadas en redes sociales, los datos que generamos en Internet son guardados por empresas tecnológicas que están sujetas a requerimientos judiciales.
- En Estados Unidos, las normas que autorizan estos requerimientos son más laxas, y hasta la policía puede solicitar datos personales. Esto ha hecho saltar las alarmas sobre los datos relacionados con la interrupción voluntaria del embarazo tras el fallo de la Corte Suprema que dejó sin efecto “Roe v. Wade”.
El fallo de la Corte Suprema que dejó sin efecto el precedente revocación de la sentencia ‘Roe contra Wade’ de 1973, que daba acceso a la interrupción voluntaria del embarazo en Estados Unidos, abrió un cisma en el mundo digital. Pensemos simplemente en una persona que acuda a una clínica para abortar y que Google Maps registre su ubicación, o en sus historiales de búsqueda en Internet y las conversaciones que pueda mantener en redes sociales. Después de la decisión del máximo tribunal Supremo de Estados Unidos, también circularon muchos mensajes instando a las mujeres a eliminar sus apps de control menstrual como parte del ecosistema de recogida masiva de datos personales a través de aplicaciones online.
Esta sensación de falta de control sobre nuestros datos se incrementó al saberse que una adolescente de 17 años y su madre fueron acusadas de aborto ilegal cuando la joven estaba embarazada de 23 semanas en Nebraska (EE. UU.), después de que Facebook entregara una copia de una conversación privada entre ambas tras elbajo requerimiento de un juez. En ese Estado, la interrupción voluntaria del embarazo es ilegal a partir de las 20 semanas, pese a que se intentó bajar a 12 unas semanas antes.
Las empresas detras plataformas como Facebook e Instagram, Twitter o TikTok hicieron a lo largo del verano una serie de anuncios de medidas que pondrían en marcha para facilitar el acceso de sus trabajadoras a estados en los que se permitiera el aborto, por ejemplo. Sin embargo, quedaron muchas cosas en el tintero sobre qué pasaría con sus normas comunitarias o sus políticas de moderación, algunas sin resolver al día de hoy.
Hacemos un repaso por los posicionamientos de las grandes compañías tecnológicas (en los casos en que los hayan hecho públicos). Las que hemos además consultado y; algunas han contestado y, otras, no.
Este artículo se actualizará con las novedades relacionadas.
¿Cuándo están las empresas obligadas a entregar datos personales de sus usuarios y cuándo pueden negarse?
Todos los datos que generamos al utilizar redes sociales y plataformas digitales son recopilados y almacenados por empresas tecnológicas que en ocasiones están obligadas a entregarlos si lo solicita un juez. Esto se aplica de forma general a cualquier país, pero también entran en juego acuerdos específicos entre regiones para garantizar que se puedan hacer solicitudes -como Estados Unidos y la Unión Europea-. Normalmente, un tribunal estadounidense sólo tendría jurisdicción en EE. UU., pero en base a estos acuerdos puede también requerir información a empresas extranjeras. De la misma manera, ciertos estados podrían pedir datos a empresas de países en los que sus tribunales no tienen jurisdicción, y estas podrían entregarlos voluntariamente o no.
En muchas ocasiones, estas empresas intentan objetar si los requerimientos son muy amplios o el objetivo no está claro. En EE. UU., la Ley de Portabilidad y Responsabilidad de Seguros de Salud (HIPAA, por sus siglas en inglés) sí que obliga a guardar el secreto profesional en consultas médicas relacionadas con un aborto, pero no aplica en otras situaciones, como las relacionadas con los datos que registra una plataforma digital para el resto de situaciones.
Esta situación no es nueva. Las normas de cualquier Estado permiten que autoridades, como jueces y tribunales, puedan solicitar la información necesaria para decidir en un procedimiento, pero tanto el tipo de información, como la forma y los plazos dependerán de cada lugar, explica Elena Gil, abogada experta en derecho digital y protección de datos a Maldita.es, medio cofundador de Factchequeado.
En el caso concreto de Estados Unidos, Gil especifica que su legislación permite de manera amplia que las autoridades obtengan información, una tradición que puede derivar de los atentados terroristas del 11S, sobre todo para poder acceder a comunicaciones o información de personas extranjeras que supongan un riesgo para lade seguridad nacional (a partir de la Ley de Vigilancia de Inteligencia Extranjera, conocida como ley FISA, por sus siglas en inglés). Por ejemplo, en EE. UU. no solo pueden solicitar datos jueces y tribunales, sino también autoridades policiales.
Una vez que la información ha sido solicitada, ¿cómo puede reaccionar una empresa? En general, “es obligatorio responder a un requerimiento de información de un tribunal de forma completa y veraz, pero solo dentro de lo que las normas obliguen”, detalla Gil. Por ejemplo, si el requerimiento de información es “más amplio de lo permitido, las empresas pueden argumentar que parte de esa solicitud no es acorde a Derecho y restringir su respuesta”. Dentro del tipo de datos que no pueden ser entregados, están, por ejemplo, las “comunicaciones abogado-cliente” e información obtenida “de forma ilícita”. Por ejemplo, unas grabaciones ilegales.
Entendiendo cómo funciona este proceso, ¿qué sabemos de cómo han reaccionado las grandes tecnológicas en los últimos meses? Hagamos un repaso.
Amazon, Apple y Microsoft
Sobre los propios empleados
Amazon dijo que les reembolsará hasta 4,000 dólares en gastos de viaje por razones médicas, incluyendo abortos. Hay que destacar que Amazon es la segunda compañía privada de Estados Unidos que más gente emplea.
La respuesta de Apple ha ido en la misma línea y la compañía ha asegurado “apoyar el derecho de nuestros empleados a tomar sus propias decisiones sobre su salud reproductiva“, añadiendo que sus beneficios permiten a sus trabajadores “viajar fuera del estado para recibir atención médica si no está disponible en su estado de origen”.
También un portavoz de Microsoft aseguró que cubrirán los gastos de viaje para el aborto y otros servicios médicos legales cuando el acceso a la atención sea limitado en la región geográfica de origen de un empleado.
Factchequeado es un medio de verificación que construye una comunidad hispanohablante para contrarrestar la desinformación en Estados Unidos. ¿Quieres ser parte? Súmate y verifica los contenidos que recibes enviándolos a nuestro WhatsApp +16468736087 o a factchequeado.com/whatsapp.