El Senado confirmó el lunes a Bradley N. García ante la Corte de Apelaciones de los Estados Unidos para el Circuito del Distrito de Columbia. García es ahora el primer juez latino en la segunda corte más importante del país.
“Los latinos han estado históricamente subrepresentados en la banca federal”, dijo Charles E. Schumer, el líder de la mayoría en el Senado, en un discurso antes de la votación.
“Así que confirmar al primer latino en el segundo tribunal más importante es un paso muy esperado para hacer que el tribunal federal refleje mejor a nuestro país”, agregó el senador.
García tiene 37 años y es la cuarta persona designada por el presidente Joe Biden para la corte federal de apelaciones en Washington, D.C.
El nuevo juez fue confirmado en una votación de 53 a 40, con la mayoría de los senadores demócratas votando a favor. Los senadores republicanos Lindsey Graham de Carolina del Sur, Susan Collins de Maine y Lisa Murkowski de Alaska también votaron a favor de la nominación.
García fue nominado por primera vez al Circuito de DC en junio de 2022. La nominación se volvió a presentar el mes pasado, después de haber expirado cuando se terminó el último Congreso.
¿Quién es Bradley García?
García es originario de Maryland. Fue asistente legal de la jueza de la Corte Suprema, Elena Kagan, y actualmente es asistente del fiscal general adjunto de la Oficina de Asesoría Legal del Departamento de Justicia.
- Anteriormente trabajó en el bufete de abogados O’Melveny & Myers, desde 2013 a 2022.
- En esa firma, formó parte de equipos legales en disputas notables relacionadas con armas, aborto y la Primera Enmienda, reseñó Bloomberg.
- Entregó 13 argumentos de apelación, incluso ante la Corte Suprema en un caso de inmigración de 2021, llamado Estados Unidos v. Palomar-Santiago.
Entre sus clientes han estado Google de Alphabet Inc., Warner Brothers Discovery Inc. y Ford Motor Co., así como Stony Lester, a quien García ayudó a salir antes de la prisión federal porque fue clasificado erróneamente como delincuente profesional.
Grupos progresistas, como Alliance for Justice, respaldaron la nominación de García, junto con exfiscales y la Asociación Nacional de Abogados Hispanos.
Por su parte, en una audiencia de confirmación en julio de 2022, algunos senadores republicanos cuestionaron la edad de García y le hicieron preguntas sobre si su trabajo en los casos de la Corte Suprema relacionados con la religión, las armas y los derechos reproductivos revelaba inclinaciones políticas liberales.
García señaló que la “mayor parte” de su trabajo representaba a las empresas de Fortune 500 y que tenía un historial de “trabajar de manera productiva con clientes y abogados, independientemente de las afiliaciones partidistas”.