El tiroteo del 27 de marzo en un colegio de Nashville, Tennessee, provocó que tres legisladores demócratas de la Casa de Representantes de ese estado protestaran en el recinto para exigir un control de armas más estricto.
Justin Jones, Justin J. Pearson y Gloria Johnson, de 28, 27 y 60 años, respectivamente, demostraron así su solidaridad con los familiares de las seis personas que murieron en el tiroteo.
Debido a esto, los tres congresistas enfrentaron la expulsión del Congreso, que en su mayoría es republicano. Dos de ellos han sido removidos de sus cargos, mientras que uno lo mantiene.
Qué se ha decidido en Tennessee
Las votaciones para remover o no a los tres legisladores demócratas del congreso estatal de Tenneesse se programaron para este jueves.
En un primer voto, el Congreso votó 72 a 25 para expulsar al congresista Jones.
Para la siguiente votación la congresista Jones sobrevivió, para sorpresa de los propios demócratas: La casa de representantes votó 65 a 30 para removerla, un resultado que no fue suficiente, ya que se necesita dos tercios para lograr la mayoría.
El congreso de Tennessee está compuesto por 99 legisladores.
En una tercera votación, el legislador Pearson fue expulsado del congreso con un resultado de 69 personas a favor y 29 en contra.
Las expulsiones de legisladores de los congresos estatales no son comunes y han ocurrido pocas veces en la historia de Estados Unidos. La más reciente ocurrió en 2016.
Cómo se llegó hasta este punto
Desde que sucedió el tiroteo, cientos de estudiantes, padres y profesores han marchado hasta el Capitolio del estado para exigir leyes que endurezcan el control de armas en Tennessee.
Durante estas protestas, los representantes Jones, Pearson y Johnson interrumpieron una sesión del Congreso bajo el lema “No acción, no paz”.
El portavoz de la cámara comparó esta protesta de los legisladores con los manifestantes que asaltaron el Congreso de los Estados Unidos en 2021. Y calificó sus acciones como “inaceptables.”
Además, les prohibió el acceso al edificio del Congreso estatal y los apartó de sus asignaciones habituales.
Los republicanos, quienes gobiernan Tennessee, han rechazado los llamados para endurecer las leyes relacionadas con las armas y se han enfocado en reforzar la seguridad en los colegios.