Los funcionarios de la administración del expresidente Donald Trump probaron las boyas flotantes en 2020 y habrían sido los de la idea de colocarlas en el Río Bravo, según informó NBC News.
Un exfuncionario de Trump presentó las boyas flotantes contra inmigrantes este año al gobierno de Texas.
Otro exfuncionario de la Patrulla Fronteriza habló de forma anónima para NBC afirmando que anteriormente se había hablado del sistema de boyas, pero nunca se había considerado seriamente colocarlas debido a las preocupaciones de que podría violar un tratado con México.
La cadena flotante con sierras que colocó Abbott
El gobernador de Texas, Greg Abbott, colocó la cadena de boyas flotantes de 1 mil pies en el Río Grande para evitar el paso de inmigrantes a Estados Unidos, pero la idea, en principio, fue promovida por la administración de Trump.
Rodney Scott, quien fue jefe de la Patrulla Fronteriza en 2020, dijo para NBC News que había visto que en otros países usaban boyas como barreras para proteger a los barcos en los puertos.
Para ese año, Scott comenzó a revisar solicitudes de los contratistas para crear un sistema similar a lo largo de la costa del Pacífico en San Diego y en el Río Bravo.
Scott dijo que decidieron usar “discos giratorios” planos entre las boyas flotantes para evitar que los inmigrantes se suban en ellas.
La demanda del Departamento de Justicia
La administración del presidente Joe Biden demandó a Texas por la colocación del sistema de boyas flotantes con sierras en la zona de Eagle Pass.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos señaló que esta medida plantea preocupaciones humanitarias, representa un riesgo para la seguridad pública y viola la Ley Federal de Ríos y Puertos.
Por otro lado, el gobierno de México afirmó que Texas viola su soberanía al colocar las boyas en un río que limita con ambos países.
En respuesta, el gobernador Abbott aseguró que “no cambiará” su decisión hasta que el gobierno de Biden controle el flujo migratorio en los cruces fronterizos.