Funcionarios federales advirtieron que un aumento en el discurso de odio, antisemitismo y la desinformación en Twitter está conectando y popularizando a algunos de los mismos extremistas que han influenciado a las personas a participar en protestas violentas, incluido el ataque del 6 de enero de 2021 contra el Congreso.
Los funcionarios predicen que Twitter contribuirá a más violencia en los próximos meses, citando la proliferación de contenido extremo, incluido el apoyo a los nazis genocidas por parte de celebridades con muchos seguidores y el resurgimiento de proselitistas de la teoría conspirativa de QAnon y nacionalistas blancos.
Desde que Elon Musk compró Twitter hace poco más de un mes, ha recortado a más de la mitad del personal, incluido a los trabajadores que emitían juicios sobre lo que se considera calumnias inadmisibles contra grupos religiosos o étnicos.
Musk anunció una amplia amnistía para la mayoría de las cuentas previamente prohibidas y ha interactuado personalmente con activistas marginales y nacionalistas blancos en el sitio en las semanas desde que asumió la propiedad.
Otros actores han experimentado con publicaciones racistas y antisemitas para probar los límites de Musk como autodeclarado “absolutista de la libertad de expresión”.
Incluso antes de la toma de posesión de Musk, algunos usuarios de Twitter fomentaban las confrontaciones con personas transgénero y otros que eran falsamente representados como “preparadores” o depredadores que atacan sexualmente a víctimas menores de edad.
La ola de antisemitismo en Twitter
La nueva ola de antisemitismo llegó a millones de personas en solo unos días, trajo nuevos seguidores y ayudó a envolver una coalición más amplia de figuras marginales.
“Este tipo de escalada y odio y deshumanización, el odio a la población judía, es un objetivo realmente dirigido. La violencia es inevitable”, comentó Denver Riggleman, un ex oficial de inteligencia de la Fuerza Aérea que integra el comité de la Cámara que investiga el ataque del 6 de enero en el Capitolio.
El Departamento de Seguridad Nacional advirtió el miércoles que los terroristas cibernéticos estaban manteniendo “una presencia visible en línea en un intento de motivar a los partidarios a realizar ataques”, citando mayores riesgos para las minorías raciales, religiosas, las personas homosexuales y transgénero, así como para las instituciones gubernamentales.
“Incidentes recientes han puesto de relieve la amenaza permanente para las comunidades basadas en la fe, incluida la comunidad judía”, comunicó el departamento.
El odio inicia en Twitter, pero va más allá
El Departamento de Seguridad Nacional explicó en el comunicado que la conducta en línea y fuera de línea a menudo se refuerzan mutuamente en un ciclo de escalada. Los tiroteos recientes en un bar gay de Colorado generaron elogios en línea, lo que alentó posibles ataques de imitadores.
Asimismo, un hombre de Nueva Jersey fue arrestado el mes pasado después de publicar un manifiesto en línea por ataques a sinagogas, y un segundo sujeto fue atrapado con un arma después de tuitear sobre planes para “disparar contra una sinagoga y morir”.
Lo más alarmante para Joel Finkelstein, cofundador del Network Contagion Research Institute (NCRI), una organización sin fines de lucro, ha sido la unificación y elevación de voces poco escuchadas desde el ataque al Capitolio.
El NCRI ha estado rastreando varios indicadores que muestran que el antisemitismo está en aumento, incluidas las referencias de Twitter al Nuevo Orden Mundial que se multiplican rápidamente, una teoría falsa que presenta a las élites cosmopolitas, a veces explícitamente judías, destruyendo instituciones y valores en varias naciones para ejercer más control.
Fuente principal de la noticia: The Washington Post.