En un país donde todos están en pleno debate por el límite de la deuda, las filtraciones de documentos clasificados y las carreras presidenciales que se avecinan, pareciera que el tema migratorio no tiene nada que ver con las prioridades políticas. Pero el Congreso es el Congreso y, por el contrario, la frontera tiene todo que ver.
Tanto demócratas como republicanos de ambas cámaras han movido sus respectivas propuestas. Cada uno a su manera, aunque orbitando sobre los mismos aspectos: la seguridad fronteriza, el tráfico de personas y el camino a la ciudadanía. Algo así para resumir:
Dos caras, dos miradas
El miércoles, los republicanos impulsaron un conjunto de propuestas que busca rehacer la ley de inmigración que dificultaría las solicitudes de asilo y haría más fácil para el gobierno federal impedir que los inmigrantes ingresen a EEUU.
- La movida legislativa republicana tiene como objetivo revivir una serie de políticas promulgadas por el expresidente Donald Trump que restringía las solicitudes de asilo. Señalan que los cruces fronterizos ilegales aumentaron bajo el mandato de Joe Biden y presentan la situación actual en la frontera como “invadida” y “peligrosa” tanto para las comunidades fronterizas.
- La audiencia también se produce cuando los republicanos, más de 100 días después de su nueva mayoría en la Cámara, están bajo presión política para cumplir una promesa clave de campaña para asegurar la frontera.
- El lado demócrata también se movió, pero en el Senado. Bob Menéndez presentó ayer un marco para renovar los programas de inmigración en medio de las preocupaciones actuales sobre la cantidad de cruces de inmigrantes en la frontera sur. El esquema propone impulsar la ayuda humanitaria a países específicos, aumentar los fondos para la seguridad fronteriza y expandir los esfuerzos para atacar a los traficantes de personas.
- El plan también abordaría el transporte de migrantes de los estados liderados por el Partido Republicano a las ciudades dirigidas por los demócratas, al hacer que el Homeland Security se encargue de reubicar a los migrantes “para poner fin al desafío actual de los estados que envían migrantes de forma independiente sin coordinación intergubernamental”.
Pero lo que se habla en el Congreso, ¿se calla en la Casa Blanca? Según una encuesta de estados indecisos de Global Strategy Group compartida a Politico, la administración Biden no está abordando lo necesario los problemas de inmigración.
- El 58% de los consultados desaprueba la forma en que el presidente maneja la inmigración, en comparación al 32% que lo aprueba. Además, el 52% considera que Biden está ignorando los problemas en la frontera.
Con información de Politico, NBC News y AP.